La portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, ha señalado, durante una comparecencia en la sede del PP, que el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2011, aprobado en el Consejo de Ministros, tiene "mucha menos austeridad de la que cuentan".
"Estos presupuestos certifican más paro y con ellos Zapatero le pone la frase a su despedida del Gobierno: Voy a dejar a España en torno al 20 por ciento de paro. Son irreales, con más paro, más impuestos y más recortes sociales y mucha menos austeridad de la que cuentan", ha explicado la portavoz 'popular'.
Así, ha anunciado que el próximo lunes pedirá la comparecencia del presidente del Ejecutivo en el Pleno, para explicar el acuerdo presupuestario que ha pactado el Gobierno con el PNV.
Además, ha destacado que estas partidas presupuestarias son "menos austeras de la cuenta" porque recortan el gasto público en un 7,9 por ciento. "La ministra Salgado ha sido pillada en la trampa y ha tenido que reconocer que es en torno a un tres por ciento, si llega, porque hay que ver cómo se ajustan y abonan la financiación de todas las administraciones territoriales", ha subrayado.
En esta línea, ha denunciado que estos presupuestos representan la "trampa de la austeridad" y el Gobierno con ello ha sido "el primero en quedar en evidencia".
Al mismo tiempo, ha puntualizado que estos PGE son "irreales" porque están hechos con las previsiones de crecimiento del PIB español del 1,3 por ciento, y éstas duplican las realizadas por organismos como la Unión Europea o el Banco de España, que se quedan en el 0,8 y el 0,6 por ciento.
Así, ha indicado que estas partidas recogen "más recortes sociales, consolidan la congelación de las pensiones, el recorte salarial al funcionariado y también deja aplazada 'sine die' la política de conciliación".
Igualmente, ha señalado que la crisis se supera "como lo haría y lo hará el Partido Popular", con reformas "estables y de calado". "La primera medida indispensable para salir de la crisis es que Zapatero salga del Gobierno", ha sentenciado Sáenz de Santamaría.
