Interior advierte a los presos que su situación no cambiará hasta que ETA desaparezca

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha realizado un enérgico discurso en los Desayunos informativos de Europa Press donde ha reivindicado la victoria del Estado de Derecho sobre ETA y ha lanzando un mensaje a los presos terroristas a los que ha advertido de que su dispersión no cambiará hasta que la banda se disuelva definitivamente o ellos rompan públicamente con ella.

A la organización criminal también le ha avisado de que no será suficiente una "treatralización" de una hipotética entrega de armas.

"La finalización de la política de dispersión dejará de ser efectiva cuando ETA anuncie su disolución definitiva", ha enfatizado el ministro quien ha añadido que, mientras eso no suceda, a los presos etarras "sólo les queda romper públicamente" con la banda.

En ese sentido ha reivindicado que el Gobierno del PP no ha variado nunca su postura y que "la política penitenciaria no se ha adaptado a la nueva situación" tras el cese definitivo de la violencia decretado por los terroristas hace dos años.

Fernández Díaz ha sido preguntado por el testimonio prestado esta semana durante un juicio contra ETA en París por un alto mando de la Policía gala, quien aseguró que los terroristas aún mantienen un gran arsenal en ese territorio y no descartó que grupos de incontrolados pudieran retomar las armas.

El ministro ha reprochado que ese tipo de informaciones relativas al armamento de ETA se digan públicamente: "España tiene información. Esas cosas, se saben, se conocen, pero no se cuentan en público. Para entregarlo (las armas), lo único que hace falta es hacerlo", ha aseverado.

"QUE NOS DEN LAS COORDENADAS"

En este punto el ministro se ha mostrado tajante con ETA a la que ha avisado de que el Gobierno no va a considerar suficiente una "escenificación teatral" en una hipotética entrega de armas o explosivos y ha recordado que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado son suficientes para verificar si esa entrega es real. Ha salido al paso de los rumores que apuntan a un gesto de los terroristas en las próximas semanas diciendo que para ello no hay que hacer declaraciones.

"Si tienen intención de entregarlas total o parcialmente que lo anuncien, que nos den las coordenadas y ya lo verificaremos", ha zanjado.

En cualquier caso el ministro no se ha mostrado partidario de alimentar este debate ya que, a su juicio, forma parte de la "teatralización de Sortu, la izquierda abertzale y ETA". "El único anuncio que nos interesa es el de la disolución definitiva de la banda", ha sentenciado al tiempo que ha garantizado que la organización criminal desaparecerá "por las buenas o por las malas".

"Eso quiere decir que o asumen que han sido derrotados y se disuelven o seguiremos actuando", ha explicado Fernández Díaz, quien ha augurado a ETA un final como el de los GRAPO.

Ha vinculado muchas de las últimas acciones de 'kale borroka' registradas en el País Vasco con la huelga de hambre que llevaron a cabo varios presos etarras en la cárcel de Sevilla entre octubre y noviembre. Sin embargo, el ministro ha destacado que este grupo de internos ni siquiera consiguió la solidaridad del resto del colectivo de presos de su organización. Protestaban por su situación en el penal andaluz.

ACCIONES DE KALE BORROKA

Los actos de 'kale borroka' "forman parte de ese escenario", según ha indicado, pero ha pedido "que el ruido no confunda el diagnóstico". Además, ha dicho que "toda manifestación que atente contra la seguridad ciudadana como quema de contenedores no hace falta aplicar la Ley antiterrorista, en el anteproyecto de Ley de Seguridad Ciudadana esas acciones están tipificadas como falta grave" (sancionadas con entre 1.000 y 30.000 euros).

En su diagnóstico ha descrito el estado actual de ETA como "una página de la historia de España que ya amarillea". "ETA, con sus métodos, son parte de un pasado que se va alejando. Hoy es el día que podemos decir que esta situación ha cambiado; ETA ya no asesina ni aterroriza, no porque se hayan convertido en demócratas, sino porque ha sido derrotada y aunque no les guste lo digo: ha sido vencida por el Estado de Derecho", ha dicho en un discurso titulado 'La gestión del final de ETA: la batalla por el relato'.

Ha recordado que en lo que va de Legislatura han sido detenidas 86 personas vinculadas a las actividades de la banda. No obstante, en esta lucha contra el terrorismo ha reconocido la labor de todos los Gobiernos anteriores y en concreto se ha detenidos en los concejales del PP y el PSOE que "dieron su vida" en el País Vasco.

"ETA NO VOLVERA"

El ministro ha asegurado que "la ETA que mató a casi 900 personas, que extorsionó, hirió, expulsó a miles de vascos y que socializó el terror ha sido derrotada y no volverá".

Además ha hecho especial énfasis en destacar que esa victoria ha sido sin contrapartidas políticas ya que la banda no ha conseguido ninguno de los objetivos por los que se creó. No han conseguido la independencia, ni un estado vasco totalitario marxista leninista ni la expulsión del Ejército y las fuerzas de Seguridad ni la anexión de Navarra".

"ETA no ha conseguido ninguno de sus objetivos acercándose aunque sea remótamente a cualquier sensación de victoria", ha reivindicado al tiempo que ha añadido que "la sola atribución de matiz alguno con un componente victorioso sí sería un éxito para ETA. Por eso nadie debería concedérsela. Nada les debemos y nada les daremos, mucho menos las gracias por dejar de matar. Con los terroristas no se negocia políticamente".

Escuchando el discurso del ministro se encontraba la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría; El ministro de Economía, Luis de Guindos; el Ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón; toda la cúpula del Ministerio del Interior así como altos mandos de la Policía y la Guardia Civil; la Delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes; la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal; la líder del PP vasco, Arantza Quiroga y el delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo entre otros.

También se encontraba una nutrida representación de víctimas del terrorismo encabezada por la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Mari Mar Blanco. El ministro ha tenido numerosas alusiones en su discurso a la víctimas del terrorismo, a las que ha situado en el centro del relato tras la derrota de ETA.

"Las víctimas siempre deberán estar presentes en nuestro futuro", ha dicho el ministro quien al terminar el acto se acercó a saludarlas personalmente.