El ministro de Educación, Cultura y Deporte, Iñigo Méndez de Vigo, ha anunciado en el Pleno del Congreso que el Gobierno va a aprobar en 2018 un real decreto de Formación Profesional para "reforzar la oferta" y se dará "un paso más" en las modalidades tradicionales en España, que actualmente cuenta con 161 títulos.
Así lo ha anunciado en la Sesión de Control al Gobierno, en la que ha tenido que responder a tres preguntas y una interpelación de los socialistas sobre Formación Profesional, gasto educativo y acceso a la Universidad, así como a una pregunta de Ciudadanos sobre el adoctrinamiento en las escuelas en Cataluña.
Méndez de Vigo ha defendido el aumento del alumnado en la Formación Profesional, que ha pasado de 192.000 alumnos en grado medio en el curso 2012-2013 a 349.000 en 2015-2016, un 86% por ciento más. Asimismo, ha señalado que estudiantes de FP de grado superior han aumentado en este mismo periodo más de un 90% (de 180.000 a 353.000); en FP Básica en el último curso el alumnado se ha duplicado, hasta los 61.909, y en FP Dual, de 4.000 en el curso 2012-2013 a 24.000 en el 2015-2016.
También ha dicho al PSOE que el Gobierno ha apostado por el desarrollo de una "FP moderna y de calidad" con la regulación de las titulaciones, pero que son las comunidades autónomas las que deciden "cómo, cuándo y dónde" impartirlas.
El ministro ha anunciado que España va a volver a participar en las competiciones internacionales de Formación Profesional, de las que ha destacado la importante participación de las empresas, y en los dos últimos cursos estas competiciones se habían reducido al ámbito nacional.
Por su parte, el diputado socialista Guillermo Meijón ha reprochado al ministro la falta de plazas en la Formación Profesional, que deja fuera del sistema a "miles de alumnos" o la falta de oferta suficiente en la primera opción elegida por los jóvenes. Asimismo, ha acusado al Gobierno de recortar la partida destinada a la FP: "No se puede hacer más con menos".
Meijón le ha pedido que no se "escude en grandes titulares ni en el Pacto educativo" y resuelva los problemas del sistema de Formación Profesional. "Empiece ya porque es urgente", ha insistido el diputado socialista al ministro, al que también le ha advertido de la "parálisis" y la "incapacidad" de su ministerio para eliminar el límite de 21 años en determinados programas de FP y para permitir a las personas con discapacidad intelectual acceder a la FP Básica.
BECAS Y TASAS
El ministro también ha respondido al socialista Manuel Cruz, que le ha reprochado el recorte en becas universitarias, el endurecimiento de los requisitos académicos para acceder a ellas y el aumento de las tasas, que ha generado que España sea el cuarto país con los precios más altos. Según ha advertido este diputado socialista, estas circunstancias han dejado fuera a "miles" de jóvenes de la Universidad y ha puesto a las familias en la tesitura de elegir cuál de sus hijos va a la Universidad.
Méndez de Vigo ha defendido que el Gobierno no ha recortado las becas, sino que el presupuesto para este fin ha superado en 2017 los 1.420 millones de euros y ha subrayado que el sistema es más "sostenible" que con el Gobierno del PSOE porque, si no, genera un déficit "difícil de soportar". Asimismo, ha destacado que el rendimiento académico del alumnado becado ha aumentado con el endurecimiento de los requisitos académicos.
GASTO EDUCATIVO
El diputado del PSOE Pere Joan Pons también ha reprochado al ministro de Educación la reducción del gasto educativo y le ha advertido de que está al nivel de hace diez años, pese al aumento del alumnado en las aulas. "Estamos más cerca del 3% del PIB que del 5%" de la media de la Unión Europea, como recomienda la OCDE. "Los recortes lo han pagado los profesores y los alumnos, sobre todo los de necesidades educativas especiales", ha apostillado.
El titular de Educación ha contestado que el aumento del gasto educativo en esta legislatura y la anterior es "irrefutable" y ha explicado que el déficit generado por el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero obligó a España a cumplir con el objetivo de déficit marcado por la UE y a tomar decisiones que afectaron al sistema educativo, que se han "revertido".
Por último, ha pedido a los socialistas que no basen sus argumentos sobre el gasto educativo con el PIB como referencia y les ha explicado que hay que tener en cuenta el gasto anual por alumno como porcentaje del PIB: "En ese límite estamos comparables a los niveles de la OCDE en Primaria y Secundaria y algo más bajo en terciaria".
