El Gobierno anuncia el final del estado de alarma para la medianoche de este sábado

  • Los controladores aseguran que a partir de este sábado la normalidad continuará en los aeropuertos

El vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha dado por cumplidos los objetivos que llevaron al Gobierno a decretar el estado de alarma, que concluye mañana sábado a las doce de la noche.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Rubalcaba ha recordado que esa medida excepcional se adoptó por la inasistencia de los controladores a sus puestos de trabajo y tenía un doble objetivo: garantizar la normalidad en los aeropuertos durante las Navidades y encauzar el final del conflicto.

"Entendemos que los objetivos que tenía el Gobierno cuando declaró el estado de alarma se han cumplido", ha señalado Rubalcaba, antes de apuntar que los españoles han podido viajar con normalidad y se ha encauzado el diálogo para el final del conflicto.

El vicepresidente ha recalcado que ya hay un diálogo que ha sido fructífero, un árbitro, un catálogo de temas y un calendario para solventar el problema que concluirá con el laudo que se firmará el 28 de febrero.

En este sentido, ha recordado que el conflicto tiene muchos años de antigüedad, pese a que su forma más dañina se ha manifestado en los últimos meses.

Rubalcaba ha explicado que el presidente del Gobierno firmó ayer el decreto que se publicará mañana en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y por el que se devuelve la normalidad a la navegación aérea. El fin del estado de alarma coincide, según el ministro, con la retirada de los militares de las torres de control.

LOS CONTROLADORES ASEGURAN QUE A PARTIR DE ESTE SÁBADO LA NORMALIDAD CONTINUARÁ EN LOS AEROPUERTOS

El portavoz del sindicato USCA, César Cabo, ha asegurado este viernes que la normalidad continuará en todos los aeropuertos españoles a partir de mañana, fecha en la que finalizará el estado de alarma, como "es habitual", y ha destacado que el trato de los militares ha sido de "absoluto respeto". "Sin inmiscuirse en nuestro trabajo han estado presentes en todos los cambios de turno", ha explicado en un encuentro digital en Antena3 TV.

Cabo ha incidido en que lo que ocurrió el pasado 3 de diciembre, cuando los controladores abandonaron masivamente sus puestos de trabajo, fue "una situación excepcional", provocada "tras meses de decretos y cambios constantes de las condiciones laborales" del colectivo. "El cierre del espacio aéreo no fue una decisión de los controladores sino de AENA y es algo totalmente anómalo", ha insistido.

Preguntado por quién pagará los daños ocasionados no ya a las aerolíneas y sector turístico, si no a los más de 600.000 afectados por el 'plante' de los controladores, Cabo afirmó que serán los tribunales competentes los que tendrán que determinarlo, pero consideró que será un proceso largo que llevará "algunos meses".

El portavoz recordó que en las últimas dos décadas "no ha habido ninguna huelga" de control aéreo en España y señaló que los controladores están "luchando por recuperar la estabilidad laboral"."Nos deniegan reducciones de jornada por maternidad, nos anulan vacaciones concedidas, nos obligan a trabajar en tus días libres bajo amenaza de expediente grave, no cuentan tus bajas por enfermedad en tu jornada laboral y trabajamos hasta 50 horas a la semana, mucho más que el resto de los controladores en Europa. Hemos sufrido una reducción superior al 50% y un recorte de derechos laborales sin parangón en la democracia", ha denunciado.

Cabo explicó que para ser controlador actualmente hay que pasar unas pruebas y pagar, si eres seleccionado, 40.000 euros por un curso de seis meses que antes era gratuito y con garantías de contratación. "Ahora no hay seguridad de ser contratado y AENA pretende contratar a tiempo parcial durante dos años con salarios que no se ajustan a la responsabilidad del puesto", indicó.

CONFIAN EN NO TENER QUE ACUDIR AL ARBITRAJE

En cuanto a la negociación que mantienen con AENA para la renovación del convenio, cuyo plazo termina el próximo 31 de enero, Cabo confió en que pueda cerrarse un acuerdo entre las dos partes "sin necesidad de recurrir al árbitro, Manuel Pimentel"."Hemos aceptado el arbitraje como fórmula final para resolver el conflicto laboral. Si todo va bien, no será necesario recurrir a él y tendremos un convenio firmado el 31 de enero, esa sería la mejor noticia para todos, empezando por los usuarios", ha afirmado.

En caso de que esto no sea posible, Cabo indicó que los controladores acatarán "en cualquier caso la decisión del árbitro si entra en liza".

EL MODELO ACTUAL ES "MUY DISCUTIBLE"

En relación al modelo actual aeroportuario, reconoció que el actual es "muy discutible", ya que en España existen más aeropuertos que en el resto de países europeos y la mayoría "son y serán" siempre deficitarios.

Como ejemplo, se refirió al aeropuerto de Huesca, con una media de algo menos de 10 pasajeros al mes, o al de León, en el que se han invertido 80 millones de euros para una instalación "que nunca va a tener demasiados pasajeros".

Cabo opinó que el tráfico aéreo es "un servicio público" esencial para las islas pero "no tan necesario" en ciudades pequeñas. "Este número excesivo de aeropuertos hace que la productividad de los controladores españoles sea más baja en comparación a Europa".