Familiares y amigos de Juan Mena, el joven asesinado la madrugada del domingo tras ser asaltado por tres jóvenes en Conil de la Frontera (Cádiz), acudieron este martes al Tanatorio Sur de Madrid adonde llegaron ayer sus restos mortales procedente del Tanatorio de Cádiz. Tras oficiarse el responso, este mediodía se celebra el entierro del joven en el cementerio Sur de la capital.
Mientras, los tres jóvenes de 19 años acusados de matar a Juan M.S., madrileño de 21 años, en la madrugada del pasado domingo en Conil de la Frontera (Cádiz), han pasado a disposición judicial. Pasadas las diez y media de la mañana, los dos jóvenes que han pasado la noche en los calabozos de la Guardia Civil de Conil han salido de camino a los juzgados de Chiclana (Cádiz) donde prestarán declaración ante el juez. El tercero de los acusados fue trasladado anoche a las dependencias de la Guardia Civil en la misma localidad chiclanera con el objetivo de "mantenerlos separados", según han informado fuentes cercanas al caso. Los tres detenidos, cuyas identidades se corresponden con las iniciales M.R.P., J.C.M. y M.N.M., son vecinos de Conil de la Frontera y cuentan con un amplio historial de infracciones y otros antecedentes, según la Guardia Civil, que ahora les acusa de un homicidio doloso y un robo con violencia.
Los hechos sucedieron sobre las seis de la mañana en una zona de copas de la localidad gaditana, cuando la víctima, un joven de 21 años que pasaba unos días de vacaciones en Conil de la Frontera, estaba conversando con una amiga, ambos sentados en un banco a la altura del número 15 de la calle Chiclana. Según recoge la prensa local, la amiga y principal testigo explicó a los agentes de la Guardia Civil que se acercaron con "la excusa de pedir un cigarro cuando intentaron robarle el bolso". Tras esto, Juan M.S. inició un forcejeo durante el que uno de los agresores asestó dos puñaladas en el tórax a la víctima, tras lo que los asaltantes emprendieron la huida.
Cuatro horas después, sobre las 10.30, la víctima falleció en el Hospital de Puerto Real a consecuencia de las dos puñaladas, una le lesionó el corazón y otra el pulmón.
Tras el apuñalamiento la Guardia Civil puso en marcha un dispositivo que contó con la colaboración de Policía Local, el personal del Centro de Salud, hosteleros de la zona y vecinos.
La investigación permitió recoger evidencias en el lugar de los hechos, que, junto con diversos testimonios, permitieron centrar las sospechas en tres jóvenes de la localidad que cuentan con "un amplísimo historial delictivo", según la Guardia Civil.
Sobre las 21.00 horas, cuando los investigadores registraron el domicilio de uno de ellos y encontraron allí ropas y un arma blanca con restos de sangre, los tres jóvenes fueron detenidos.
La Guardia Civil analiza ahora los restos de sangre para determinar si pertenecen al fallecido.
