Cospedal urge al cambio para acabar con quienes ven CLM como su "latifundio"

La candidata a la Presidencia de Castilla-La Mancha, María Dolores De Cospedal, ha urgido hoy a un cambio de gobierno y a un "gobierno de cambio" en Castilla-La Mancha para abrir una nueva época y acabar con quienes ven la región como su "latifundio".

En su proclamación oficial como candidata, la secretaria general de los populares ha estado arropada por la dirección nacional casi al completo, así como por la presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, y la líder del PP de Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho.

Ante un auditorio lleno -la organización del acto ha tenido que habilitar una sala contigua y montar una pantalla gigante-, De Cospedal ha llamado al cambio para que Castilla-La Mancha recupere su prestigio y "se adelante al futuro", pero también, y sobre todo, para poner fin después de 30 de gobierno a quienes ven la región como "su latifundio" y se prodigan en "escándalos".

De eso tratan las elecciones autonómicas del 22 de mayo, de "terminar con escándalos" como el que supuso el desmantelamiento de Caja Castilla La Mancha o el "hundimiento" del aeropuerto de Ciudad Real, y de "sinsentidos" como el que ha rodeado la localidad toledana de Seseña.

Se trata también de expulsar de los círculos de poder a aquellas personas que "han creído que esta tierra era su latifundio".

Los comicios del 22 de mayo, al menos en Castilla-La Mancha, comunidad clave para el PP porque por primera vez el partido de Mariano Rajoy tiene posibilidades serias de ganar, son fundamentales para España, como ha reconocido la secretaria general de los populares.

En la comunidad, y luego en todo el país, las elecciones de dentro de tres meses servirán para devolver un empleo digno a los parados, conseguir ingresos, acabar con la pobreza, garantizar las pensiones de los mayores...

"Tratan de pasar página a un gobierno enemigo de la austeridad, que ha creado todo un bosque de empresas y de organismos públicos y de entidades que sólo han valido para conservar sus propios privilegios", ha resumido la candidata del PP en alusión al Ejecutivo actual y antes de sentenciar: "Vamos a terminar con esos lujos faraónicos".

Hay que acabar, por tanto, con "el despropósito" del gobierno de José María Barreda, a quien no ha nombrado durante la intervención.

Clausurada esa etapa, un nuevo Gobierno del Partido Popular emprenderá las reformas necesarias, bajará los impuestos, impulsará la inversión, hará competitivos los negocios y, como ha recalcado De Cospedal, buscará implantar "un proyecto global" que recupere la confianza en la región.

Asimismo, ese "Gobierno del cambio" abonará "las más de 90.000 facturas" que la Junta "tiene escondidas en un cajón" y que adeuda a los proveedores, así como bajará el nivel de endeudamiento, hoy de casi 7.000 millones.

Entre loas a Rajoy, la presidenta del PP de Castilla-La Mancha y secretaria general del partido ha trazado las líneas generales éticas de lo que quiere que sea su gobierno.

Será un Ejecutivo que "construya consensos donde hay desacuerdos, que no confunda la política con la persecución política y que no mienta" y que, además, fomentará la concordia y las oportunidades para todos.

"Es un reto muy difícil, pero hemos aceptado el desafío y estamos preparados para ser protagonistas", ha concluido.