Son como un policía más. A la derecha, los del turno de mañana y a la izquierda los de la tarde.
Clayton llegó a la policía con 10 meses. Fue entregado por sus dueños porque no se hacían con él. Desde la unidad canina nos dicen que se le echa de menos, porque el vínculo creado entre perro y
guía llega a ser muy fuerte. Clayton se jubiló pero no hay una edad específica de jubilación para estos perros.
Ahora quedan 23 perros entrenados y preparados para cada una de las especialidades. Búsqueda de drogas o dinero, explosivos o rescate. Viven aquí y cada uno tiene su placa identificativa
Como el caso de RON, con casi 3 años se decica a la búsqueda de estupefacientes, en una de sus intervenciones encontró cocaína en un coche.
Los perros aprenden siempre en positivo, jugando, nunca castigándoles. Además de su guía cada perro tiene un padrino... lo que está claro es que ellos se ven como un compañero más.
