El recuento final de las entradas del Madrid Arena asciende a 16.791

  • El aforo del Madrid Arena se superó en un 58 % según el recuento de entradas

El recuento final de las entradas de la fiesta del Madrid Arena, en la que murieron cuatro jóvenes, ha arrojado una cifra de 16.791, lo que supera sobradamente -en un 58,4 por ciento- el aforo permitido para el evento.

Según han informado fuentes jurídicas, hoy se han contabilizado las cuatro urnas que faltaban de las ocho que encontró la Policía, y se han contabilizado 764 en la primera, 3.000 en la segunda, 1.832 en la tercera y 1.938 en la cuarta.

En las cuatro urnas anteriores, que fueron contabilizadas el pasado viernes, se encontraron 9.277 boletos, por lo que cifra total asciende a 16.791, un 58,4 por ciento más del aforo permitido, establecido en 10.600 personas.

FLORES MINTIÓ

Para los abogados de las familias de dos de las fallecidas, Rocío Oña y Belén Langdon, el recuento ha demostrado que el aforo permitido se superó "inmensamente", y el promotor del evento, Miguel Ángel Flores, "mintió" al asegurar que únicamente había puesto a la venta 9.650 entradas.

Los letrados han coincidido en que a las casi 16.800 entradas de las urnas hay que añadir las 2.000 ó 3.000 personas que supuestamente se colaron, procedentes del botellón que había en las cercanías, y las que entraron con invitaciones de los DJs o con pulsera, con lo que el número total de asistentes rondaría los 20.000.

Por el momento no se tiene constancia de que en las cajas hubiera entradas falsificadas ni duplicadas, aunque unas 15 de ellas "no eran como el resto", según han precisado.

Felipe Moreno, abogado de la familia de Rocío Oña, ha sostenido que el número de entradas halladas "pone en tela de juicio todas las declaraciones que se están efectuando tanto en la comisión de investigación del Ayuntamiento como ante el juez".

"Estamos hablando de un hecho gravísimo, de que intencionadamente se ha vendido un numero de entradas a sabiendas de que se superaba casi el doble del aforo permitido y comunicado", ha añadido.

El abogado de la familia de Belén Langdon, Abdón Núñez, ha hecho hincapié en que la Policía encontró las urnas en un pabellón anexo al Madrid Arena gracias a que el juez ordenó precintar el edificio, y ha recordado que, según ha reconocido la empresa organizadora de la fiesta, Diviertt, eran los empleados de ésta los encargados de guardarlas.

"A mi, personalmente, no me cabe ninguna duda de que se habían trasladado a otro sitio para intentar esconderlas", ha dicho el letrado, que también ha afirmado que las entradas "no se han debido destruir porque no han podido".

Abdón Núñez ha asegurado que la Policía ha custodiado adecuadamente las entradas desde que las encontró, en contra de los sostenido por el gerente de Diviertt.

En cuanto a la comisión de investigación del Ayuntamiento de Madrid, el letrado ha dicho que no le ofrece "ninguna garantía"ni "credibilidad" y cree que no sirve "para nada", ya que los imputados deben declarar ante el juez.

"Parece más una reunión de amigos", ha sostenido el abogado, que ha precisado que hacía estas declaraciones desde el respeto.

Los letrados de las cuatro acusaciones particulares tienen previsto reunirse esta tarde para coordinarse y actuar de manera conjunta y esperan tener acceso a todas las diligencias cuanto antes, incluidos los vídeos en los que se ve cómo acceden los jóvenes al Madrid Arena.

El juez del caso, Eduardo López Palop, ha informado hoy a las partes de que se han solicitado nuevas personaciones en la causa, como las de algunos jóvenes que acudieron a la fiesta y una asociación.

El abogado de la familia de Rocío Oña ha afirmado que el magistrado está "desbordado" y necesita que el juez decano o el Tribunal Superior de Madrid le pongan personal de apoyo "porque si no, podríamos ir a una causa de seis o siete años de duración".

López Palop ya ha solicitado un refuerzo o "juzgado bis", cuya aprobación compete al Consejo General del Poder Judicial, según han confirmado hoy fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.