Un violador múltiple reincidente reconoce en el juicio que violó a tres jóvenes

  • Negó las agresiones en instrucción, pero ahora lo admite ante tres muestras de ADN que le incriminan
Piden 6 años de carcel para los padres que encerraron con candado a su hija
La Audiencia Provincial de Madrid juzgará a partir de este martes a unos padres por encerrar en julio de 2013 a su hija de 16 años con un candado en una habitación, durante dos días, después de que llegara una hora tarde de una fiesta y por pegarla. Esta pareja será juzgada por la comisión de un delito de detención ilegal y otro de lesiones en el ámbito de la violencia doméstica. El fiscal solicita para cada uno de ellos una pena de seis años de prisión. |Telemadrid

Un violador múltiple reincidente ha reconocido en el juicio que se ha celebrado este lunes en la Audiencia de Madrid que violó a tres jóvenes entre 2001 y 2002, si bien ha asegurado que no recuerda los hechos de los que se le acusa.

José Rubén, de nacionalidad ecuatoriana, se ha sentado en el banquillo de los acusados por tres delitos de agresiones sexuales. En un principio, la fiscal solicitaba para él una condena de 33 años de cárcel, mientras que la acusación particular elevaba esta petición a 45 años de cárcel.

El procesado, que ya cumplió una condena por delitos similares, negó en instrucción las violaciones. Sin embargo, ahora lo admite, dado que existen pruebas de ADN que le incriminan en tres violaciones cometidas en los distritos de Arganzuela y Latina. No obstante, mantiene que no se acuerda de nada.

Tras reconocer los hechos, el procesado ha aceptado una condena de 24 años de prisión tras alcanzar las partes un acuerdo de conformidad. En los próximos días, se emitirá la sentencia que confirme este pacto de pena de prisión.

AGRESIONES SEXUALES

El procesado actuaba en paradas de autobús y en portales. La primera violación se produjo el 31 de julio de 2001, cuando abordó por la espalda a una joven de 19 años de edad en una parada de autobús en el madrileño barrio de Campamento.

Tras propinarle un fuerte empujón y amenazarle, la llevó hasta un parque cercano donde le exigió que se desnudara para violarla cuchillo en mano. El siguiente ataque sexual sucedió en febrero de 2002 contra una joven de 19 años a la que asaltó en un portal de un inmueble de la calle de Los Yébenes.

La tercera agresión, que como las anteriores se cometió a altas horas de la madrugada, se produjo el 20 de mayo del 2002 en la calle Batalla del Salado de Madrid. Nuevamente, en un portal de la citada vía y amenazando a su víctima con una navaja en el cuello, asaltó a una joven de 23 años.