Un acusado de robar a tres taxistas afirma que sólo hacía 'simpas' y que nunca portó un arma

Antonio G. C., acusado de robar y retener a tres taxistas a punta de pistola, ha afirmado en el juicio que solo hacía los denominados 'simpas', manifestando que nunca uso ningún arma porque las tiene miedo.

Así lo ha señalado al tribunal de la Audiencia Provincial de Madrid que le juzga por tres delitos de robo con intimidación y tres delitos de detención ilegal, con la agravante de reincidencia. Se enfrenta a 28 años de cárcel.

Además, ha recordado que en aquella época, en octubre de 2015, estaba enganchado a la cocaína y a la heroína. Por ello, solía indicar a los taxistas que le llevaran a Valdemingomez, uno de los mercados de la droga de la región.

Sus víctimas en cambio han manifestado que les retenía a punta de pistola para obligarles a darle el dinero. Uno de los taxistas logró mandar a la Policía un mensaje alertando del atraco, siendo el acusado detenido cuando se dirigieron a Villaverde.

HECHOS JUZGADOS

Según el fiscal, el acusado tomaba un taxi, enseñaba o indicaba que llevaba una pistola y obligaba a los taxistas a llevarle a diferentes direcciones donde se bajaba del vehículo y dejaba al conductor bajo la vigilancia de otra persona, según las víctimas en algún caso con aspecto de toxicómano, para después retomar otro camino de vuelta, a cuyo término exigía al profesional que le diera cuánto dinero llevaba encima.

Fue detenido cuando el último de los taxistas asaltados le siguió, le vio introducirse en un portal del barrio de Moratalaz y dio aviso a la Policía. Uno de los taxistas no pulsó en ningún momento el botón de emergencias porque justo después de mostrarle la pistola, le dijo: "Sé que en ese lado tienes el botón de socorro, si le das te dejo seco".