Tercera jornada en Cibeles Madrid Fashion

'STANCE' es la colección que Ana González ha presentado en la segunda parte del tercer día de Madrid Cibeles Fashion Week. Se trata de tomar una postura, la correcta para uno mismo, dentro de la multiplicación de voces, vidas y circunstancias que somos cada uno de nosotros, según explica la propia diseñadora.

La propuesta de Ana Locking para la próxima temporada de otoño-invierno 2011/12 se basa en las formas geométricas multicolores. Y es que esta diseñadora ha querido dejar claro que existe la libertad para combinar y mezclar el rojo junto al camel, mostaza, nude, turquesa, amarillo, azul klein, beige, gris y negro.

En cuanto a las formas, partiendo de la base de las líneas geométricas, también han destacado los cortes rectos y hombreras pronunciadas en combinación con pantalones por encima del tobillo, de talle alto y de acabado acampanado, vestidos por encima de la rodilla o los clásicos largos asimétricos o de cuello cerrado y sin mangas y siempre plagados de múltiples plisados que daban una inmejorable caída a lo largo de la falda. .

Para la confección de las prendas, Ana Locking ha querido utilizar el crêpe de chine, crepé satin, paño de lana, cachemir, mikado de seda, musselina, popelin de algodón y sarga de seda en todos sus diseños, consiguiendo un acabado fino y elegante.

En este particular desfile también ha habido hueco para la línea masculina de la diseñadora, en la que los hombres se entremezclaban con las mujeres luciendo unas prendas que han seguido la misma línea que las de la parte femenina. Abrigos, jerseys y pantalones bicolores han contrastado con el que, sin duda, ha sido el diseño más arriesgado de Ana: faldas cortas y largas también para los hombres, llenas de plisados y en color negro.

Ailanto, flores que resurgen entre el hielo y la roca

Ailanto nos trae una colección marcada por las ventiscas y las heladas que, sin embargo, se calman para dejar paso a las primeras flores. Su propuesta está basada en el trabajo fotográfico de Jacques Henri Lartigue sobre los deportes de invierno en los años veinte, y en ella predominan los tonos neutros y las sensaciones tridimensionales.

El desfile de Ailanto se ha desarrollado sobre una pasarela transformada en pista de hielo, sobre la que nos han mostrado sus ideas para la temporada otoño-invierno 2011-2012, caracterizada por los fríos gélidos.

Los tonos neutros, ya sean blancos, marrones o negros, y los estampados lisos han predominado durante toda la propuesta, sólo rotos en momentos por dos tipos de elementos.

Por un lado, el color, que en algunos modelos se introduce de forma sorpresiva con rojos, fucsias, rosas y naranjas, que suponen así un toque de calor entre tanto frío invernal.

Y por otro, más allá de las nieves nos encontramos estampados floreados, de pétalos y hojas que nos mantienen en contacto con la temática centrada en la naturaleza y nos auguran la llegada de la primavera.

Los cortes de patrones se alternan en dos. Como primera parte de la propuesta, Ailanto presenta siluetas tipo lápiz, con monos inspirados en el atuendo de los esquiadores que dan lugar a una geometría totalmente vertical y recta.

Claro que la diferencia con los deportistas la marcan las telas. Los monos de Ailanto están confeccionados con tejidos vaporosos de algodón y seda, tan finos que en coasiones alcanzan la transparencia.

La segunda parte se basa, por contra, en el volumen. La sensación tridimensional se muestra con prendas superiores pesadas y abultadas que dan paso a una parte inferior ligera y en movimiento.

Para ello, Ailanto ha escogido el punto -en sus variantes de viscosa, lana y cloqué- con el que han confeccionado abrigos, capas, chalecos, ponchos y chaquetas de mangas anchas y en ocasiones abullonadas.

Mientras, en la parte inferior, fadas y vestidos largos, además de pantalones que suponen otra muestra de la tan anunciada vuelta de la campana. Los tejidos, en este caso, vuelven a ser vaporosos para dar gran sensación de movimiento que asemeja a los vientos invernales.

Las propuestas se ven coronadas por una serie de cuidados complementos, que incluyen bolsos de mano ante y piel, muñequeras con piedras engarzadas sin pulir y -por supuesto- gruesas bufandas y calcetines de punto listos para protegernos de las bajas temperaturas.

Davidelfín rompe su cromatismo neutro con laberintos verdes y azules

El desfile de Davidelfín ha cumplido con su estilo clásico de líneas rectas en sobrios grises y negros roto súbitamente con una explosión de verdes y azules recogidos en entramados laberínticos. El diseñador ha recibido la ovación de una 'front row' plagada de celebrities que se han mostrado maravilladas con la propuesta.

Un cerro de ropa amontonada, de vistosos colores y estampados, señalaba el inicio de la pasarela. La música clásica ha comenzado a sonar y, con una austeridad más tarde interrumpida, la colección otoño-invierno 2011-2012 de Davidelfín ha aparecido ante el público.

Siguiendo la línea característica del diseñador, los modelos masculinos y femeninos han ofrecido una imagen andrógina marcada por las líneas rectas y los colores neutros, que han conformado un aura de sobriedad y elegante sencillez.

Ellas han lucido vestidos con entramados estampados en blanco y negro, vestidos lisos en tono gris que simulaban un traje de neopreno con cremallera en la espalda, y chaquetas divididas en franjas cromáticas que seguían siempre el orden negro - gris - crema.

Ellos, por su parte, han lucido monos con el mismo estampado blanco y negro, trajes de chaqueta que cumplían igualmente las franjas tricolor, y chaquetas de neopreno gris.

En cuanto a los complementos, las féminas han lucido altísimos tacones de aguja con plataforma, en color negro con suela roja, y alguna que otra pulsera ancha plateada. Los modelos masculinos mostraron zapatillas de cordones tipo botín, en negro, y grandes bolsos con cilindros de madera atravesados, que recordaban a un hato.

Una segunda parte del desfile ha comenzado cuando Davidelfín ha introducido los colores, que han roto súbitamente el cromatismo neutro característico del diseñador.

Primero se han mostrado una serie de diseños en verde, con vestidos de manga larga y faldas con vuelo, ajustados a la cintura con pliegues verticales, y trajes de falda y chaqueta, en el caso de las mujeres.

En cuanto a los hombres, trajes de chaqueta verde y pantalón cargo negro se han combinado con la clásica camisa blanca de cuello alto cerrado distintiva de Davidelfín.

Los tonos verdes han dejado paso a los azules, que se han revelado en diseños similares marcados por un elemento llamativo: un estampado laberíntico que, con su aspecto enrevesado, altera las líneas rectas definitorias de la colección.

El broche del desfile ha sido la aparición de Bimba Bosé, imagen de la marca, luciendo un traje de pantalón negro y levita azul, además de una incipiente tripita de embarazada, y a la que sus amigos de las primeras fila han aclamado.

EL 'FRONT ROW', ENCANTADO CON LA PROPUESTA

La sala Lancia del recinto de Cibeles se ha abarrotado para recibir a Davidelfín, y la estrechez de espacio ha alcanzado incluso a la primera fila plagada de estrellas, muchas de ellas habituales del entorno del diseñador.

Alaska, Mario Vaquerizo, Bibiana Fernández, Antonia San Juan, Loles León, los integrantes del grupo Dover y Miguel Bosé han sido algunos de los muchos rostros conocidos que se han acercado al desfile, y algunos de ellos han querido dar su opinión sobre la colección.

La cantante de Fangoria, Alaska, muy contenta al escuchar cómo para ambientar los aplausos finales sonaba su tema 'Más es más', ha comparado la propuesta de Davidelfín con "un cuadro flamenco".

"Me ha encantado la mezcla de raso con el fieltro, y sobre todo lo verde me ha parecido precioso", ha declarado a Europa Press. "Todos los años David nos pone una canción, es un clásico. Yo nunca sé cuál va a poner, es una sorpresa que me encanta".

Por su parte, su marido Mario Vaquerizo ha tildado el desfile de "maravilloso, fenomenal, una genialidad"; aunque ha admitido que no sabe qué le gusta más, si las prendas o el propio diseñador.

"Davidelfín es una obra de arte en sí mismo, es total, me encanta lo que ha hecho y no es devoción de amigo", ha afirmado.

Otra habitual de este grupo es Bibiana Fernández, que ha calificado el desfile de "muy esquemático", y ha destacado de él "la paleta de colores", aparte de admitir que ha habido prendas que le "han vuelto loca".

Antonia San Juan ha añadido además que "el patronaje" de este diseñador "ya es a nivel de Balenciaga", y ha reconocido que Davidelfín es su "inspiración" a la hora de vestir. "Lo adoro", ha sentenciado.

La mujer ultra chic de Kina Fernández

Kina Fernández ha presentado en la Pasarela Cibeles su propuesta de mujer ultra chic, sofisticada y urbana que rescata la elegancia femenina de los años 50 y 60. Tejidos ligeros con volumen y movimiento se contraponen en esta propuesta a los cortes simples en capas de tejidos cálidos.

Con una voz hablando en inglés y francés que ha hecho referencia a hipsters y beatniks se ha iniciado el desfile de la temporada otoño-invierno 2011-2012 de Kina Fernández, marcado por diseños femeninos y sofisticados con reminiscencias clásicas.

Las formas de la mujer han quedado resaltadas por faldas y vestidos con mucho vuelo, que daban volumen a las caderas mientras los jerseys y las chaquetas masculinas y chaneleras ceñían el busto.

Los tonos beiges, marrones y grises han predominado en una colección marcada por los delicados neutros, sólo rotos por algunos diseños en total look rojo encendido que han desvelado a la mujer más atrevida a la par que chic.

La superposición de capas típica del invierno ha protagonizado buena parte del desfile, con abrigos de corte militar y gabardinas en tejidos de lana, alpaca y terciopelo, perfectos para protegernos del frío junto a los escotes cerrados y los cuellos altos que los han complementado.

Kina Fernández ha presentado además una serie de vestidos y faldas de inspiración griega, en telas vaporosas y con mucho vuelo y volumen, en tonos verdes y rosas que se han distanciado de la sobriedad del resto de la colección.

Y para los momentos más urbanos, nos han presentado una serie de chaquetas masculinas y faldas a franjas de colores oscuros, junto con pantalones de hípica para una máxima comodidad.

En cuanto a los complementos, las modelos han lucido botas altas de piel labrada con taconazo y pequeña plataforma, además de botines y zapatos de salón, en tonos marrones, ocres y negros.

El punto llamativo lo han aportado los detalles de botones de diferentes tamaños y cadenas doradas colocadas estratégicamente sobre el calzado o como broche, además de hombreras y mangas drapeadas.

En resumen, una colección de volúmenes que acentúan las líneas de la mujer con texturas cálidas para los meses más fríos, marcando una belleza clásica y chic que se desarrolla en variadas líneas fusión entre vanguardia y tradición.