Como cada año en este 27 de julio decenas de fieles acuden al Monasterio de la Encarnación para contemplar la sangre licuada de San Pantaleón solidificada durante todo el año.
Un hecho que ocurre desde que la reliquia llegó a la iglesia a comienzos del siglo 17. A partir de mañana comenzará lentamente a solidificarse.
La sangre del relicario de san Pantaleón permanece solidificada durante todo el año y en el día de su fiesta aparece licuada. Una tradición desde que la reliquia está en el monasterio, desde comienzos del siglo XVII.
Es un hecho insólito. La ampolla ha permanecido herméticamente cerrada desde que llegó al monasterio, prodecente de la catedral del Ravello.
La ampolla con la sangre del santo se puede admirar en el Monasterio de la Encarnación.
Cada media hora, se dará a besar a los fieles la reliquia de uno de sus huesos, que se guarda también en el relicario del monasterio.
