Roban 22 coches de una empresa de alquiler en Tetuán

  • Los ladrones reventaron la cerradura de las oficinas para deshacerse de las cámaras y la alarma
  • Robaron los servidores con las imágenes

Una banda de ladrones ha robado un total de 22 coches, la mayoría de lujo y valorados en un millón de euros, de una empresa de alquiler del madrileño distrito de Tetuán, según ha informado a Europa Press el propietario de la compañía Daperton Group, David Pérez Tomé.

El robo se perpetró el domingo por la noche. Un grupo de personas forzó con un aparato especial las cerraduras de la nave, situada en la confluencia de las calles Paseo de la Dirección y Francos Rodríguez, a pocas calles de la sede de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.

Los 'cacos' deshabilitaron todos los sistemas de seguridad, tanto alarmas como las cámaras, forzaron la entrada a la oficina, y poco a poco se fueron llevando 25 de los 45 que había, ya que casi todos tenían las llaves dentro. Dejaron casi todos los coches de menor valor, salvo el más preciado de la nave, un Lamborghini de unos 150.000 euros, ya que no consiguieron su llave.

EL PROPIETARIO NO SALE DE SU ASOMBRO

El dueño de la compañía Daperton Group, que lleva trabajando 20 años en la zona sin incidentes, todavía no se cree cómo pudieron llevarse tantos valiosos coches sin llamar la atención entre los vecinos.

De hecho, sólo un residente de un edificio anexo asegura que notó ruidos extraños a las 23 horas del domingo, pero no les dio importancia. Tampoco notaron por la zona movimientos de camiones para transportar vehículos. Por tanto, una de las hipótesis es que al menos 22 personas tuvieron que acceder esa noche al garaje para llevarse uno a uno los vehículos.

Fue un empleado el que se percató de lo ocurrido el lunes por la mañana. La central de alarmas no se dio cuenta del robo debido a la rápida y eficaz desactivación de los sistemas. Y es que la por ello la Policía cree que se trata de una banda profesional.

Pérez Tomé se puso en contacto con la Policía, que emprendió desde el primer momento un gran dispositivo de localización, incluso en fronteras, para evitar su salida fuera de España. La operación ya está dando sus frutos.

Así, los agentes han localizado en las últimas horas siete vehículos aparcados en la calle en una misma zona del madrileño distrito de Latina. Esta mañana le han entregado tres de ellos a su dueño. Los otros cuatro están siendo analizados por la Policía Científica para localizar huellas dactilares.

Entre los coches encontrados se encuentra el más valioso de los sustraídos, un Mercedes Benz clase M250, que vale casi 70.000 euros, así como tres monovolúmenes de la misma marca valorados en casi 60.000 euros, un deportivo SLZ de casi 45.000 euros, un Fiat y un Peugeot, los dos coches más baratos de la lista.

Aún quedan por localizar 15 coches. La mayoría son Mercedes, alvo dos Smart y tres Abarth 500, alquilados, entre otros, por jugadores de fútbol y baloncesto. Todos los vehículos no tienen más de un año y medio de antig~edad, porque la empresa los renueva con frecuencia.

El responsable de Daperton también se ha puesto en contacto con el seguro contratado, que ha tomado nota de lo ocurrido. No obstante, en este tipo de robos, deben esperan 30 días hasta que el seguro empiece a hacerse cargo.

COINCIDENCIAS CON OTRO ROBO SIMILAR

El robo del domingo se ha convertido en el mayor de este tipo ocurrido en Madrid, superando al registrado a principios de 2012 en el distrito de Fuencarral, cuando fueron robados casi una veintena de vehículos de alta gama. Con el paso de los días fueron recuperados por la Policía y arrestó a los presuntos responsables.

De hecho, David Pérez Tomé ha recibido hoy la llamada del propietario del concesionario de Fuencarral, que en su momento ofreció una recompensa a los que dieron con los coches, quien se ha solidarizado por lo ocurrido y le ha ofrecido ayuda.

Ambos han hablado de las similitudes y diferencias entre ambos 'golpes'. Se parecen en el 'modus operandi', ya que en los dos casos fueron inutilizadas las alarmas con un inhibidor de frecuencia, rompieron las cámaras y se llevaron los servidores donde almacenaban las imágenes.

Y se diferencian en que en el primer caso hubo sospechas, que no se llevaron a materializar, de la implicación de uno de los trabajadores en el robo. El responsable de las llaves fue despedido. En el caso actual el dueño de la nave no cree que haya empleados cómplices, aunque el Grupo XXI de la Brigada de la Policía Judicial, que se encarga de la operación, no descarta ninguna hipótesis.