Representantes de los taxistas piden modificaciones en la tarifa fija a Barajas

La tarifa única del taxi entre el centro de Madrid y el aeropuerto de Barajas, que entró en vigor el martes, ha provocado discrepancias entre los casi 16.000 taxistas madrileños, cuyos representantes se han reunido hoy con el Ayuntamiento para pedir modificaciones a la ordenanza municipal.

La nueva tarifa fija de los taxis madrileños establece un precio único de 30 euros para los viajes entre Barajas y la almendra central de la ciudad -el interior de la M-30- en ambos sentidos, y además se cobra un precio mínimo de 20 euros para las carreras que tengan como origen el aeropuerto y destino zonas fuera de la M-30.

También se mantiene una cuantía máxima de 5 euros por este concepto -carreras a y desde el aeropuerto- para la Zona A (Madrid capital) y de 8 euros para la Zona B (resto de área de prestación conjunta). La puesta marcha de la medida está enfrentando a las asociaciones y organizaciones más representativas del sector, algunas de las cuales han llegado a denunciar que existen taxistas que hacen "trampa" para cobrar cantidades que están por encima del precio legalmente establecido.

REUNIÓN CON EL AYUNTAMIENTO

Para tratar de arreglar estos problemas, los representantes de los taxistas y responsables de Movilidad del Ayuntamiento han mantenido esta mañana una reunión en la que algunos de los profesionales del taxi han propuesto que se excluyan de la tarifa única las carreras que el cliente solicita a través de internet o del teléfono móvil.

Según ha informado Miguel Ángel Leal, secretario de la Asociación Gremial del Taxi de Madrid, algunos de los participantes en el encuentro también han pedido al Ayuntamiento que amplíe el plazo para adaptar los taxímetros a las nuevas tarifas que, ha explicado, terminaba ayer, 7 de enero.

El Ayuntamiento se ha comprometido a estudiar ambas peticiones y, en su caso, a trasladarlas a la Comisión de Precios, según el secretario de la Asociación Gremial, una de las organizaciones que cuenta con más taxistas asociados (alrededor de 7.000) y que apoya la tarifa única entre Madrid y Barajas.

Leal ha señalado que el contenido de la ordenanza municipal que establece la tarifa fija "se conocía desde hace un año" y a pesar de ello aún hay "unos 500 taxistas o más" que no han adaptado sus taxímetros ni las capillas de los vehículos "alegando que se han agotado las piezas o que los talleres no dan abasto", ha afirmado.

Por eso, la Gremial ha solicitado al Ayuntamiento que, en caso de que autorice ampliar el plazo de adaptación, este "no vaya más allá del presente mes de enero" pues consideran que ha habido "tiempo suficiente" para que todos los vehículos estuvieran ya listos.

Asimismo, se han opuesto a la petición de que se excluya de la tarifa única los servicios que se soliciten por teléfono móvil o internet como reivindican la Federación Profesional del Taxi, Radioteléfono Taxi, Radio Taxi y AEMT, basándose en que no pueden cobrar los tiempos de espera si el cliente no está listo en el momento en que el taxi pase a recogerle.

La Asociación Gremial ha exigido además al Ayuntamiento que se castigue a los taxistas que cobran ilegalmente suplementos que no están contemplados en la tarifa fija y que se les apliquen las sanciones correspondientes, que van desde el precinto de la licencia por tres meses hasta multas de 1.001 euros como mínimo.

El sistema de tarifa única "va a tener errores hasta que no este más engrasado", ha admitido Miguel Ángel Leal, pero ha subrayado que "cobrar suplementos extra no es un error porque se hace a propósito" y que en ese caso, se deben denunciar esos comportamientos para que sean sancionados.

Entretanto, la Confederación de Consumidores y Usuarios de Madrid (CECUMadrid) ha reiterado que la tarifa "plana" de 30 euros no es competitiva y resulta "lesiva" para el usuario y ha pedido que sea una opción y no una obligación para que se pueda elegir entre ella o el taxímetro.