Prisión para dos anarquistas y en libertad cuatro por atacar dos bancos en Madrid

El juez de la Audiencia Nacional Juan Pablo González ha decretado prisión incondicional para dos integrantes del grupo anarquista Straight Edge Madrid y ha dejado en libertad a otros cuatro, tras pagar sus fianzas, por los ataques con artefactos incendiarios en dos sucursales bancarias de Madrid.

Los dos para los que el juez ha decretado su ingreso en prisión provisional y sin fianza son J.B. y B.M, mientras que ha acordado prisión eludible bajo fianza para D.B. (10.000 euros), F.J (4.000), D.H (3.000) y C.B. (3.000).

Según fuentes jurídicas, estos cuatro últimos han abonado sus fianzas hoy mismo y han quedado en libertad por orden del juez.

El magistrado les imputa un delito de constitución, promoción, dirección y pertenencia a organización terrorista, en relación con tenencia y depósito de sustancias o aparatos explosivos, inflamables, incendiarios o asfixiantes, así como un delito de daños y estragos con finalidad terrorista.

En los seis autos individualizados en los que adopta esta decisión, el juez considera que J.B. y C.B se erigieron en los líderes de este colectivo jerarquizado en el que cada uno tiene "diferentes grados de implicación y decisión", lo que confirma "el carácter de Straight Edge Madrid (SXE MAD) como una organización criminal cuyas acciones (...) buscan subvertir el orden constitucional".

La Policía tuvo conocimiento de la existencia de este grupo a raíz de un incendio el pasado 30 de enero en una sucursal de La Caixa en la calle Cebreros número 40 de Madrid en el que el colectivo "dejó su impronta" en forma de grafiti en la fachada del edificio en el que se ubica la oficina bancaria, días antes del ataque.

Además, SXE cuenta con diversas páginas web "en las que aparecen fotografiadas la referida oficina siendo objeto de pintadas amenazantes, así como la oficina de la entidad financiera Bankia", situada en el número 40 de la misma calle del barrio de La Latina y que el 7 de mayo de 2013 "sufrió un ataque de las mismas características".

Los investigadores consiguieron después vincular a este colectivo "con la difusión de diversos vídeos en los que se hacen continuos llamamientos a la violencia contra el Estado y el capital, haciéndose menciones expresas a la necesidad de atacar a lo bancos y a las fuerzas de seguridad", relata el auto.

También, dice el juez, ha quedado probada "la difusión de innumerables consignas en las redes sociales destinadas a promover la violencia organizada con el fin último de subvertir el orden constitucional, la participación de sus miembros en graves alteraciones del orden público y agresiones a las fuerzas de seguridad".

Asimismo cree acreditados los daños en establecimientos comerciales de Madrid y Barcelona durante esos disturbios "y los intentos reiterados de okupar inmuebles para destinarlos a centros sociales de este colectivo", que a raíz de las detenciones ha anunciado su disolución en su página de Facebook.

El juez envía a prisión a J.B. al considerarle "uno de los miembros más activos de la organización, siendo el responsable de las páginas web", del colectivo junto a C.B., "responsable de los contenidos audiovisuales emitidos por el colectivo", fundamentalmente en Youtube.

En uno de esos vídeos, tres encapuchados hacen llamamientos a la violencia y manifiestan su responsabilidad en los ataques a esas entidades bancarias.

En los seis registros practicados, algunos de ellos en la zona de Aravaca de la capital y otros en Las Matas, los agentes se incautaron de botes de humo, bengalas, petardos, productos químicos pendientes de análisis, once mechas de tela, doce cohetes, tres martillos rompelunas y un cortafríos, entre otros efectos.

Los Straight Edge tienen su origen en los años 60 en Estados Unidos como un movimiento musical punk que se fue extendiendo a Latinoamérica y que llegó a España ya en una derivación radical.