Monteagudo responsabiliza del botellón a la jefa policial del Madrid Arena

  • El exjefe de la Policía Municipal defiende que el dispositivo policial del Madrid Arena era correcto
  • Madridec facturó el Madrid Arena para un aforo menor de 5.000 personas

El exjefe de la Policía Municipal Emilio Monteagudo ha trasladado hoy en el juicio toda la responsabilidad a la jefa del dispositivo policial del Madrid Arena, Cándida Jiménez, al afirmar que ella priorizó su misión en el recinto en vez de denunciar el macrobotellón que se celebró en el Lago de la Casa de Campo. Monteagudo es el único de los procesados que no está acusado por la Fiscalía, pero sí por las acusaciones particulares de las familias de las fallecidas, que apuntan a su responsabilidad por no evitar el botellón del exterior, que consideran como clave en la tragedia que se produjo más tarde en el pabellón.

El exjefe policial ha dicho que la jefa de Policía del Distrito de Moncloa-Aravaca, Cándida Jiménez, que era responsable del operativo desplegado aquella noche, decidió centrarse en su misión principal en el recinto, que no ha detallado cuál era, en lugar de denunciar el botellón que se estaba produciendo en el exterior.

"Dentro de la priorizacion del Madrid Arena y respecto a lo que ocurra a un kilómetro, ella por su experiencia y su buena fe optó por no denunciar ese botellón, por no intervenir", ha asegurado.

Igualmente, ha querido dejar claro que el botellón interior no era su competencia, puesto que se celebró en un parking privado controlado ya por Seguriber, la empresa contratada por Madrid Espacios y Congresos (Madridec) para la seguridad exterior del pabellón.

Respecto al desarrollo de la noche, ha negado que la responsable policial solicitara refuerzos, sino que sólo se limitó a comunicar que, en caso de llamadas por problemas relacionados con el consumo de alcohol en la zona de Lago, "a un kilómetro del evento", se derivasen a patrullas del distrito de Latina y no se ocupasen los agentes desplegados en el Arena.

En esa comunicación que se produjo a las 00.19 horas Jiménez "no hizo ninguna petición de refuerzo", ha señalado, si bien una abogada de la acusación particular ha leído el texto de la grabación de aquella llamada en la que la responsable policial afirma que "no disponen de personas para disuadir" la concentración de personas en el área de Lago. Pero Monteagudo ha recordado que existía un turno de refuerzo que Jiménez podía haber solicitado por emisora y que ella no lo hizo.

Si que ha reconocido que ella "tenía facultad inspectora" para entrar y comprobar si había sobreaforo en el interior del recinto, aunque la Policía no recibió ninguna denuncia de exceso de aforo. En su interrogatorio, ha defendido que el dispositivo policial era "suficiente". "Naturalmente que sí", ha respondido cuando ha sido preguntado sobre si el número de efectivos desplegados era el correcto.

También ha querido dejar claro que el nivel de riesgo del evento se elevó horas antes de la fiesta de medio a alto, por lo que se dotaron de más medios, es decir, se pasó de 12 a 18 efectivos. "Ella tenía efectivos suficientes", ha destacado.

Según Monteagudo, la responsable policial disponía también de dos patrullas más que ella misma destinó a Plaza de España y a la Plaza de los Cubos, porque "no entendía que esos efectivos la podían hacer falta"·

No obstante las acusaciones particulares, que han iniciado el interrogatorio a Monteagudo al no estar acusado por la Fiscalía, defienden que el número de agentes fue de 12 y no de 18 porque nunca se llegó a modificar el nivel de riesgo. Pero se ha desmarcado de su responsabilidad sobre esa variación porque es una decisión que compete a dos mandos policiales que son el inspector y subinspector del distrito 1. "Fue una orden verbal que hizo el inspector y que fue perfectamente legal", ha añadido.

Ya el día 6 de noviembre el mando policial Gerardo del Rey le comunicó que aquel día se produjo una variación del nivel de medio a alto. "Creo recordar que vi el informe de Gerardo que argumentó la toma de decisión", ha explicado. Y ha calificado de "no habitual" la presencia de policías de paisano en eventos de este tipo salvo que exista una motivación relacionado con alguna posible actividad ilícita como trapicheo de drogas o reventa de entradas.

MADRIDEC FACTURÓ EL MADRID ARENA PARA UN AFORO MENOR DE 5.000 PERSONAS

Por su parte, la representante legal de Madrid Destino, la empresa municipal que reemplazó a Madrid Espacios y Congresos (Madridec), ha asegurado que la factura para el alquiler del Madrid Arena en la fiesta de Halloween del 1 de noviembre de 2012 fue para un aforo menor de 5.000 personas.

Tras los interrogatorios a los quince acusados, que han finalizado hoy con la declaración del exjefe de la Policía Municipal Emilio Monteagudo, ha sido el turno de los cinco responsables civiles implicados en el caso: Madridec, Seguriber, Ayuntamiento Kontrol 34 y Diviertt, aunque sólo han declarado los dos primeros.

Así, la representante de Madridec Ana Varela ha señalado que la factura emitida a Diviertt para el alquiler del pabellón se hizo sobre un aforo menor de 5.000 personas. Se da la circunstancia de que el promotor del evento Miguel Ángel Flores dijo en el juicio que el "precio de arrendamiento (del Madrid Arena) dependía del aforo".