La población extranjera que vive en España ha descendido por primera vez en quince años, una bajada de la que es responsable la Comunidad de Madrid y, en mucha menor medida, Murcia y Navarra, dado que en el resto de regiones ha continuado creciendo.
Así lo reflejan los últimos datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), según los cuales la población extranjera residente en España se ha reducido, en 2012, en 15.229 personas, el 0,26 %, respecto al año anterior.
El pasado año, sólo tres comunidades autónomas vieron reducida su población extranjera, especialmente Madrid, dónde 52.531 personas optaron por volver a sus países de origen, seguida de Murcia, con 2.470 salidas, y Navarra, de dónde se marcharon 1.977 personas de otros países.
Desde el INE, la jefa de la Unidad de Padrón, Ana Jurado, ha explicado a EFE que una de las causas de la salida de los extranjeros es la grave crisis económica que desde 2008 sufre España, y que ha hecho que este país deje de ser visto como un lugar de oportunidades.
No obstante, ha añadido que el padrón se actualiza mediante unos procedimientos técnicos y complejos que hacen que en el mismo ejercicio, en este caso 2012, figuren las bajas de personas que quizá lleven más tiempo, incluso años, fuera del país, lo que podría explicar parte de la abultada cifra de la Comunidad de Madrid.
Por nacionalidades, los ecuatorianos son el grupo más numeroso de extranjeros que en 2012 optó por abandonar España, con 52.536 ciudadanos que regresaron a su país, seguidos de los 26.831 colombianos y de los 13.062 bolivianos.
Además, en 2012 volvieron a su país 11.480 argentinos, 9.909 peruanos, 7.726 brasileños, 2.142 portugueses, 1.675 polacos y 866 franceses.
A pesar de que, en total, 126.227 extranjeros salieron de España el pasado año, esta cifra fue compensada en parte por los más de 100.000 ciudadanos de otros países que decidieron probar suerte en este país.
Así, destacan los 31.496 rumanos, 14.568 marroquíes, 9.869 chinos, 9.819 paquistaníes, 6.698 ingleses, 3.908 italianos, 3.485 búlgaros, 2.650 ucranianos, 1.698 dominicanos, 891 alemanes y 421 paraguayos que apostaron por España para buscar un futuro mejor.
Tras el retorno registrado en 2012, las comunidades autónomas con mayor concentración de población extranjera son Baleares, con el 21,67 %, la Comunidad Valenciana (17,22 %) y Murcia (16,17 %), mientras que, por el contrario, las que menos presencia de extranjeros tienen son Extremadura (3,84 %), Galicia (4,03 %) y Asturias (4,72 %).
Según el último padrón, en España residen 47.265.321 personas, lo que indica un crecimiento del 0,16 % respecto a 2011, es decir que la población empadronada se ha incrementado en 74.828 personas.
De total de residentes en España 5.736.258 son extranjeros, el 12,14 %, un porcentaje que ha permanecido estable en los últimos cuatro años.
De los 5,7 millones de extranjeros que actualmente viven en España, 3,3 millones, el 57,4 %, proceden de países de fuera de la Unión Europea (UE) y 2,4 millones, el 42,6 %, de la UE.
Por nacionalidades, los extranjeros con más presencia en España son los rumanos (897.203, el 25,6 % del total), seguidos de los marroquíes (788.563, el 13,7 %), los ingleses (397.892, el 6,9 %), los ecuatorianos (308.174, el 5,4 %) y los colombianos (246.345, el 4,3%).
No obstante, en porcentaje, los países que más han aumentado su presencia en España el pasado año, fueron Pakistán, con el 14 %, China (5,9 %), Rumanía (3,6 %) y Ucrania (3,1 %).
Por el contrario, los ciudadanos que más redujeron su presencia fueron los procedentes de Ecuador (14,6 %), Colombia (9,8 %), Argentina (9,5 % ) y Perú (7,5 % ).
Mientras, la población total en España no ha dejado de crecer en los últimos quince años, pese a que, en esta ocasión, el número de extranjeros no haya seguido esa tendencia como ocurría desde 1998, año en el que había empadronados 637.085 extranjeros de una población total de 39.852.651 habitantes.
Esto se debe a que el número de españoles empadronados ha continuado creciendo y el pasado año figuraban inscritos 90.057 más que en 2011.
Actualmente la edad media de los españoles es de 42,5 años, frente a los 34,6 años de los extranjeros residentes en España, según los últimos datos del INE.
