Las inversiones del Ayuntamiento de Madrid caerán más de un 39% el año próximo

  • El presupuesto del Ayuntamiento y sus organismos autónomos desciende un 8,9% y se queda en 4.526 millones
  • Los gastos en personal caen un 8,41% y los gastos corrientes se reducen un 3,43%

Las inversiones que el Ayuntamiento de Madrid acometerá en el ejercicio 2011 caerán un 39,18 por ciento con respecto al presupuesto del año actual hasta los 279,64 millones de euros, como consecuencia de las medidas de ajuste presupuestario que se han debido llevar a cabo para contener el déficit. Así se ha puesto de manifiesto en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno que el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, y el delegado de Hacienda, Juan Bravo, han ofrecido este jueves para presentar los presupuestos municipales del ejercicio 2011. El alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, ha asegurado este jueves que Madrid "no se va a parar" a pesar de que "lo han puesto difícil" y ha añadido que el Gobierno central les ha "movido el suelo" mientras caminaban.

Los Presupuestos del Ayuntamiento de Madrid para 2011, aprobados hoy como proyecto por el Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón, permitirán rebajar la deuda del consistorio hasta 6.105 millones de euros sin tener que subir los impuestos ni recortar los servicios sociales.

El Ayuntamiento de Madrid tiene en estos momentos una deuda de 7.175 millones de euros, pero las amortizaciones que efectuará este año obligado por el Gobierno la situarán al cierre del ejercicio en 6.453 millones y el mantenimiento de la misma situación en 2011 la dejarán en esos 6.105 millones, tras el pago de otros 348 a lo largo del año.

En total, el Ayuntamiento podrá gastar el próximo ejercicio 4.542,48 millones de euros, un 8,27% menos que este año, tras situarse en un escenario de ingresos equivalente al de hace cinco años, aunque si se añaden las empresas públicas y Madrid Calle 30, la reducción llega al 9,4%.

Sumado este presupuesto a los de 2009 y 2010, la disminución del gasto del Ayuntamiento de Madrid en tres años sería del 13% acumulado.

NO HABRA NUEVAS INVERSIONES

Según han explicado en rueda de prensa el alcalde y su delegado de Hacienda, Juan Bravo, la fórmula para conseguir pagar esa deuda sin refinanciarla y sin subir impuestos ni recortar servicios sociales es, básicamente, reducir un 39,18% las inversiones reales, que de este modo quedarán en 279,64 millones.

Con ese dinero se podrán acabar las obras ya iniciadas, incluida la del Palacio de Cibeles, pero no iniciar una sola más en todo el año, ni siquiera el 60% no ejecutado aún de la reforma del eje Prado Recoletos, pendiente del vito bueno de la Comunidad, que según el regidor es un compromiso para la próxima legislatura.

El segundo factor de la fórmula será la disminución de lo que Ruiz-Gallardón ha llamado el "gasto propio". En este apartado ha mencionado los 124 millones de euros que se ahorran con la bajada de retribuciones de los empleados públicos, incluida la del 15% de los concejales y altos cargos, la amortización de 1.295 plazas vacantes, la no contratación de personal interino y la reducción de las horas extraordinarias.

A ello ha sumado el recorte en los gastos administrativos, entre ellos los de atenciones protocolarias (27%), dietas y viajes (55%) y conferencias (81%).

Ruiz-Gallardón ha destacado que no sólo no suben los impuestos y que incluso baja un 9% la tasa de basuras, sino que ha asegurado que no lo harán en el futuro, cuando la situación sea mejor.

SE SUSPENDE LA POLITICA DE COOPERACIÓN HASTA QUE CAMBIEN LAS CIRCUNSTANCIAS

Todas las áreas del Ayuntamiento bajarán su presupuesto en 2011, más la de Obras y Espacios Público, un 23,4%, debido a la disminución de las aportaciones a Madrid Calle 30, ya que se ha previsto en los Presupuestos el sí que dio el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a la subrogación de la deuda de esta sociedad al Ayuntamiento, lo que reducir el gasto en 100 millones de euros.

En todo caso, ese dinero se ha recogido en otro capitulo que no se ejecutará salvo que el Gobierno no cumpla lo comprometido, ya que a fecha de hoy, y ha pasada más de una semana, no se ha trasladado ni verbal ni documentalmente ningún aspecto relacionado con esa operación, según ha manifestado el delegado.

En el área de Servicios Sociales se suspende la política de cooperación hasta que cambie la situación financiera y se amortizan un número "importante" de puestos, según Bravo, mientras que el resto de sus políticas, por ejemplo la ayuda a domicilio y la teleasistencia, queda en los mismos términos que en 2010.

El área que más gastará de nuevo será Seguridad y Movilidad, del que depende la Policía Municipal, que pese a una reducción del 7,27% dispondrá de 1.034,49 millones de euros.

La seguridad ciudadana, con 423,41 millones de euro, es el principal gasto impropio -competencia de otras administración, en este caso el Estado- que el Ayuntamiento va a seguir asumiendo, según el alcalde.

Por otra parte, los distritos dispondrán de 561,34 millones de euros, un 7,24% menos que este año, y aunque los descensos afectan a todos, el mayor se producirá en Villa de Vallecas, un 20,09% y el menor en Vicálvaro, un 1,84%.

MADRID NO SE PARA, PESE A QUE NOS LO HAN PUESTO DIFICIL

El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, ha asegurado que, a pesar de la discriminación a la que somete el Gobierno Zapatero a Madrid, esta ciudad seguirá siendo el motor de la economía española y "seguirá avanzando con el combustible que generen los propios madrileños". "Madrid no se para, no se va a paralizar la ciudad", a pesar de que "nos lo han puesto difícil, nos han movido el suelo bajo los pies y han intentado atarnos las manos".

El alcalde ha calificado de "poco inteligente" la decisión del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de no permitir a los ayuntamientos refinanciar su deuda, ya que "el crecimiento de Madrid beneficia a todos los españoles".

Según el alcalde, Madrid "va a seguir ejerciendo su liderazgo y va a seguir teniendo unos ratios de aportación a la riqueza nacional y de empleo superiores al resto de España" y "lo vamos a hacer con el esfuerzo de los madrileños".

Gallardón anunció que, a pesar de las indicaciones que recibió del Gobierno socialista de incrementar la presión fiscal para pagar a los proveedores, en Madrid no suben los impuestos en 2011 ni siquiera en términos de IPC e, incluso, baja la tasa de basura en un 9%, mientras que se mantienen los servicios y prestaciones a los ciudadanos, y se amplían los supuestos de exención de impuestos para los más desfavorecidos.

Rebatió la afirmación de que Madrid pidiera un trato de excepción por parte del Gobierno central y aseguró que no solicitó "ninguna medida distinta que para cualquier otra ciudad de España" sino que sólo quiso conseguir "las mejores herramientas de gestión en un momento difícil".