Las genialidades de Slash protagonizan la primera jornada del Sonisphere

  • Más de 30.000 personas acudieron a los conciertos
  • Tambien sonaron clásicos como "La nube" o "Diez años"

Los increíbles solos del ex guitarrista de Guns N' Roses, Slash, protagonizaron anoche la primera jornada del festival de música metal Sonisphere, que se celebra este fin de semana en la localidad madrileña de Getafe, en la que también participaron Sôber y The Darkness.

Las altas temperaturas del verano capitalino no supusieron un impedimento para las 30.422 personas que abarrotaron el recinto desde primeras horas de la tarde.

Calor que la organización trató de mitigar con la instalación de numerosas zonas de sombra, así como de varios pasillos de agua vaporizada.

Bandas como Bullet o Angelus Apátrida inauguraron poco después de las 18:00 horas el escenario principal, por el que este fin de semana desfilarán bandas como Iron Maiden o Dream Theater.

Mientras el sol apuraba sus últimos rayos, los franceses de Gojira ofrecieron un potente set de death metal. "¿Estáis dormidos?", gritó su vocalista, Joe Duplantier, a un público que acabó rendido ante su arrolladora puesta en escena.

Por su parte, los madrileños Sôber, que en enero de 2010 oficializaron su regreso tras años de proyectos en paralelo, presentaron un espectacular show que incluyó una selección de temas de su último disco, "Superbia", como "La araña" o "Fantasma".

Junto a ellos, sonaron clásicos del nivel de "La nube" o "Diez años", cuyos contundentes "riffs" de guitarra despertaron el júbilo entre los asistentes, que disfrutaron con su directo.

Con su vocalista, Carlos Escobedo, haciendo las veces de improvisado batería, y Manu Reyes golpeando con fuerza dos timbales colocados expresamente para ese solo, Sôber se despidió de los presentes.

Fue el turno entonces de Arch Enemy, la banda sueca de death metal melódico cuya "fontwoman", Angela Gossow demostró poseer una potencia vocal inusual, a cuyo ritmo saltaron y gritaron miles de personas que esperaban impaciente el plato fuerte de la noche: la actuación de Slash junto a Myles Kennedy

No se hicieron esperar mucho más. Pasada la 1:00 de la madrugada saltaron al escenario interpretando una breve introducción instrumental, en la que el ex guitarrista de Guns N' Roses ya apuntó con sus ágiles movimientos por dónde iba a transcurrir el espectáculo.

Ataviado con sus eternas gafas de sol y su sombrero de copa negro, Slash demostró con varios habilidosos solos por qué es uno de los guitarristas más reconocidos a nivel mundial. Acompañado de una banda hecha a su medida, se mostró en todo momento confiado y entregado al show.

Tras arrancar con Ghost, tocó varios temas de su época junto al cantante Axl Rose, que fueron recibidos con mucho más interés que los que ha compuesto recientemente.

Pero lejos de cejar en su empeño, Myles Kennedy animó una y otra vez a un auditorio que respondió con entusiasmo a "Sweet Child O'Mine" y, sobre todo, a "Paradise City", en la que el legendario guitarrista dejó algunas de sus perlas.

Sin camiseta y con su instrumento todavía sonando a escasos metros de él, Slash dijo adiós al Sonisphere mientras se fundía en un abrazo con el resto de los músicos.

Dispuestos a poner un punto y final a la altura de las actuaciones anteriores, los componentes de la banda británica The Darkness ofrecieron un recital enérgico, roquero y muy animado. Su cantante, Justin Hawkins, mostró una gran entrega que los espectadores agradecieron tras más de ocho horas de música en directo.

Para mañana están previstas las actuaciones de Dream Theater, Uriah Heep y Iron Maiden, entre otros