Las populares y céntricas Puerta de Alcalá y Plaza de Cibeles serán hoy los escenarios donde se desarrollarán los actos principales del primer día de visita del papa Benedicto XVI a Madrid para asistir a la XXVI Jornada Mundial de la Juventud.
En la Puerta de Alcalá, una de las cinco que antiguamente permitían el paso a la capital, el papa cruzará el arco central acompañado de jóvenes de los cinco continentes, y recibirá las llaves de la ciudad de manos del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón.
Mandada construir por el rey Carlos III, la Puerta de Alcalá fue construida por el arquitecto italiano Francisco Sabatini sobre otro monumento anterior que amenazaba con derrumbarse.
Las obras de esta "puerta" de Madrid -declarado monumento nacional en 1976- se prolongaron entre los años 1774 y 1778, y casi cien años después la obra dejó de tener un uso público y pasó a tener la consideración de monumento. Desde ese punto, el papa se dirigirá a la próxima Plaza de Cibeles, donde los jóvenes darán la bienvenida a la JMJ al santo padre, en uno de los lugares más emblemáticos y populares de la ciudad, escenario de numerosas celebraciones, sobre todo de éxitos futbolísticos.
La fuente que da nombre a la plaza se sitúa justo en el centro de la misma, donde se alza la diosa Cibeles, subida en un peculiar carro tirado por leones. La popular fuente está en la plaza desde 1782, pero no siempre estuvo en el centro, ya que hasta 1895 se situaba en uno de los extremos de la plaza, junto al Cuartel General del Ejército.
