La Fiesta de los Toros ya es Bien de Interés Cultural en la Comunidad de Madrid

La Fiesta de los Toros es ya Bien de Interés Cultural (BIC) en la Comunidad de Madrid, después de que el Gobierno regional lo haya aprobado así hoy para "proteger su valor social, cultural, económico y ecológico". Ignacio González, vicepresidente del Ejecutivo, ha explicado en rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno que este proceso de declaración de Bien de Interés Cultural se inició hace justamente un año, el 8 de abril de 2010, y gracias a él se garantiza a los ciudadanos poder disfrutar de la tauromaquia "como referente singular del patrimonio cultural tanto nacional como de la región".

Esta declaración de Bien de Interés Cultural, en la categoría de Hecho Cultural, comprende las corridas que se ofrecen al público en plazas de toros, estables o portátiles, según la normativa vigente y que, como ha recordado González, es heredera de reglas establecidas a partir del siglo XVIII.

González ha señalado que esta decisión se ha tomado también "para acreditar la sensibilidad" de la Comunidad madrileña "ante la demanda de amparo y respaldo planteada desde distintos sectores del mundo del toro".

Desde el Gobierno regional se ha recordado que Madrid es la Comunidad que organiza mayor número de espectáculos taurinos de toda España (el 16 por ciento), y ha resaltado también que la cultura popular del toro se ha forjado en los pueblos de la región desde el siglo XV.

Y, de hecho, González ha recordado que en los escudos de algunas localidades -como Buitrago de Lozoya o el Molar- el toro aparece representado.

Más allá del valor cultural y la tradición, el vicepresidente ha afirmado que el mundo taurino tiene un destacado valor económico, ecológico y ganadero para Madrid.

Como ejemplo de ello, ha asegurado que en las dehesas madrileñas pastan en la actualidad 90 ganaderías de la especie bovina raza lidia (el 8,5 por ciento del total del país).

Los municipios con mayor número de explotaciones son Colmenar Viejo, El Escorial, Guadalix de la Sierra, Aranjuez y Soto del Real, ocupando una extensión superior a 14.000 hectáreas.

Junto a la protección de estos valores, con la aprobación de la Declaración de Bien de Interés Cultural la Comunidad de Madrid impulsará el estudio y la investigación de la tauromaquia, y preservará e incentivará la documentación histórica, ya sea en sus manifestaciones escritas, filmadas, esculpidas, pintadas o expresadas en cualquiera de los soportes de la imagen y el sonido.