Reconoce que mató a cuchilladas a su pareja y le bajan la pena de 31 a 24 años

El fiscal ha rebajado la petición de pena de 31 a 24 años de cárcel al acusado de matar a cuchilladas a su pareja, hacia la que tenía una orden de alejamiento y a la que acosaba dejándola pintadas cerca de su casa, después de que el hombre haya reconocido hoy los hechos.

"Gaby te amo, tu Romeo", es una de las frases que el procesado, René A.R., de nacionalidad boliviana, dejó escritas en las paredes y contenedores cercanos a la vivienda de la víctima, Gabriela T., de 31 años y que deja un hijo de diez años.

El Ministerio Fiscal, al igual que la acusación particular han acusado a René de los delitos de asesinato, quebrantamiento de pena, malos tratos y obstrucción a la justicia.

En el juicio, que se ha celebrado en la Audiencia Provincial, el acusado ha reconocido que días antes del crimen acudió al trabajo de la víctima para decirle que o retiraba la denuncia o la mataba. Y que el 28 de junio de 2008 se ocultó en el rellano del domicilio de Gabriela y la acuchilló hasta veinte veces para a continuación darse a la fuga.

Hasta el 23 de julio de hace dos años el acusado estuvo escondido y, según él, contó con la ayuda de la también procesada Carola S.G., la cual sabía que estaba siendo buscado por la policía pero le facilitó unos pantalones y le recargó el móvil.

Sin embargo, Carola ha negado todos los hechos a la fiscal, que ha rebajado su petición de pena por encubrimiento de dos a un año, afirmando que solo se enteró de la situación del acusado cuando se lo comunicó la Guardia Civil.

El acusado ha señalado al tribunal de la sección 27 que se arrepentía de los hechos.

Por su parte, la familia de la víctima ha pedido en los pasillos de la Audiencia madrileña que cuando una mujer tenga una orden de alejamiento se actúe y que, aunque las víctimas vuelvan con sus agresores se tenga en cuenta que, como en este caso, se hace por estar atemorizadas y chantajeadas por los agresores.

"Si el día de los hechos un policía hubiera acompañado a Gabriela hasta su casa -donde le esperaba su ex pareja-, no habría muerto", ha destacado una prima de la víctima.