Los "indignados" vuelven a Sol un año después y desafían la prohibición del Gobierno

  • Según fuentes de La Jefatura Superior de Policía unas 30.000 personas han asistido a la protesta
  • Pasadas las 22 horas, hora límite fijada por Delegación del Gobierno, continuaban en la plaza sin que la Policía haya tratado de desalojarlos

Una multitud de "indignados" ha inundado esta tarde la madrileña Puerta del Sol para conmemorar el primer aniversario del movimiento 15M y volver a reivindicar un cambio de modelo social, político y económico en un ambiente festivo y sin incidentes.

Los asistentes han abarrotado la plaza y sus calles aledañas como Carretas, Alcalá, Preciados y Montera y han festejado su vuelta, un año después, al lugar que vio nacer al movimiento, sin dejar de corear sus consignas ya conocidas como "el pueblo unido jamás será vendido" o "que no, que no, que nos representan".

Según fuentes de La Jefatura Superior de Policía 30.000 personas han asistido a la protesta.

Pasadas las 22.00, hora límite fijada por la Delegación del Gobierno para permanecer en la Puerta del Sol, los indignados, procedentes de las cuatro marchas que han partido al mediodía desde distintos punto de la Comunidad de Madrid, continuaban en la plaza, sin que la Policía haya tratado de desalojarlos.

Así, han recibido la llegada de las 22.00 horas saltando, gritando y agitando las manos.

María, una "indignada" de la marcha que ha partido desde Leganés, ha señalado a Efe que, en principio, ni ella ni sus amigos tienen previsto acampar allí, pero si ha dicho que estará hasta las doce de la noche, cuando será el momento de un "grito mudo" de protesta.

Esta indignada ha asegurado que se ha echado a la calle en esta jornada para protestar contra la actual situación en la que, a su juicio, los ciudadanos están sufriendo un "recorte" en los derechos "por los que tanto han luchado los padres y los abuelos".

Alrededor de una veintena de vehículos policiales permanecen aparcados en las confluencias de las distintas calles que desembocan en Sol, así como el edificio de la presidencia de la Comunidad de Madrid.

Paco, que se ha unido en Atocha a una de las marchas, ha indicado a Efe que se ha manifestado porque los ciudadanos "están perdiendo todos los derechos que tenían".

"Nos suben los impuestos, nos bajan el salario, rescatan a los bancos con el dinero de todos, está claro que vamos a peor", ha señalado.

Pancartas como "Generación nini, ni izquierdas ni derechas, unámonos", "No a la estafa de Bankia" o "Quiero aprender para no ser como Wert" se han podido leer entre otras tantas contra la reforma laboral y "la privatización de los servicios públicos".

Varios grupos de percusionistas ha recorrido sin cesar la plaza haciendo sonar los instrumentos a ritmo de "batukada" pero moviéndose con dificultad entre la multitud, que ha aplaudido y jaleado a los indignados que se iban uniendo a la concentración.

Durante toda la tarde los comercios han permanecido abiertos y la Policía ha acordonado la salida de la estación de Cercanías de Sol para permitir la entrada y salida de viajeros.

Está previsto, según la página web del movimiento 15M, que se lean manifiestos, proyecten vídeos, se conecten con las plazas de otras ciudades y hagan una cena-picnic con la comida que cada uno se ha traído de su casa "y un poco más para compartir".

Los actos para conmemorar el primer año del 15M continuarán hasta el martes con la celebración de distintas actividades lúdicas y asambleas para debatir sobre asuntos como la educación y la sanidad.