El presupuesto de la capital se reduce por tercer año y baja en 2012 un 4,1%

El presupuesto del Ayuntamiento de Madrid bajará en 2012 por tercer año consecutivo, en esta ocasión un 4,1% hasta los 3.879,29 millones de euros, lo que supone un 21,2% menos que los 4.923,16 millones de euros de 2008, en el primer año de la actual crisis económica. El proyecto de presupuestos ha sido aprobado hoy por la Junta de Gobierno del Ayuntamiento en la primera reunión tras las elecciones generales, según han informado en rueda de prensa el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, y su delegado de Hacienda, Juan Bravo.

Ambos han destacado que, a diferencia de lo que van a hacer la mayor parte de las administraciones con un volumen de gasto importante, el Ayuntamiento de Madrid contará con un presupuesto que prevé superávit, en concreto más de 20 millones de euros, gracias, según el alcalde "a la contención del gasto que se viene haciendo desde 2008".Es un presupuesto, ha subrayado también, "que no solamente no recorta servicios" y que no precisa de nuevos ajustes sino que permite iniciar algunos proyectos nuevos.

Ha detallado el alcalde que "se mantiene el presupuesto de Servicios Sociales" y se prevé "incluso" la puesta en marcha de nuevos equipamientos, entre ellos 10 centros de día, tres de mayores, uno de atención a mujeres, una escuela infantil y una escuela de música.

EMPLEO, UNA DE LAS PRIORIDADES

Ruiz-Gallardón ha destacado asimismo que, dado que el empleo es "una de las prioridades", el organismo Madrid Emprende incrementa su capacidad de gasto un 36%.Y ello, ha continuado, congelando los tipos impositivos -aunque el IBI sube por la revisión catastral- y reduciendo la deuda en otros 724 millones, sin necesidad de refinanciarla, como Ruiz-Gallardón ha venido demandando al Gobierno socialista en los últimos años.

Al final de plazo de cinco años en que estará vigente el nuevo Plan Económico y Fiscal del Ayuntamiento, ha garantizado el alcalde, la amortización de la deuda alcanzará un volumen de más de 3.000 millones de euros y en 2016 se el cumplirán los plazos de la ley de morosidad sin incremento de la fiscalidad. A partir de ese año 2015, ha asegurado, la totalidad de los gastos del Ayuntamiento se podrán cubrir sin ningún ingreso extraordinario, como si los habrá en 2012.

Estos serán 245 millones de euros por la venta de las acciones del CYII, fruto del convenio firmado en marzo con el Gobierno regional; y por la venta de activos, como la sede del Área de Urbanismo en la calle de Guatelamala. También el ahorro de 159 millones de euros por la no contribución a los costes de explotación de Metro tras el acuerdo alcanzado en este sentido con la Comunidad y de 90 millones como consecuencia de la reciente subrogación de la deuda de Madrid Calle 30.

A todo esto espera poder sumar el Ayuntamiento las consecuencias de las modificaciones que haga el nuevo Gobierno central del PP para dar cobertura a las resoluciones aprobadas en septiembre por la FEMP, que estima que podrían generar unos ingresos adicionales para 2012 entre 50 y 100 millones. Como prevé también que el nuevo Gobierno amplíe la línea ICO para hacer frente al pago a proveedores y poder cumplir la Ley de Morosidad, Bravo ha estimado en unos 18 meses el plazo en que el Ayuntamiento se pondrá al corriente con sus proveedores.

Ruiz-Gallardón ha declarado que el Ayuntamiento no ha querido optar, como "alguna otra administración pública territorial", dejar de presentar el presupuesto hasta conocer el nuevo marco jurídico y económico sino que ha preferido hacerlo ya, con el marco actual, y establecer en el futuro las modificaciones necesarias. Ha destacado igualmente que este presupuesto sitúa "una vez más" al Ayuntamiento de Madrid "en el marco de la lealtad institucional", ya que "no sólo se ajusta a la senda de estabilidad presupuestaria sino que además la mejora".

Estas cuentas le permiten decir, además, que, aún en tiempos de crisis, se puede dar desde las administraciones publicas una respuesta que cumpla los objetivos de estabilidad pero sin dejar de atender el compromiso con los sectores más débiles de la sociedad.