El keniano Kipserem vence con récord en el medio maratón de Madrid

Eliud Kipserem, keniano de 24 años, consiguió la mejor marca de su vida en medio maratón al imponerse en Madrid con un tiempo de 1h02:08, nuevo récord de la prueba, en un esprint con su compatriota Benson Olenakeri.

La mejor marca del medio maratón madrileño pertenecía a otro keniano, Shadrack Kiplagat, que venció en 2006 con un tiempo de 1h02:31.

Pablo Villalobos y Vanessa Veiga, actuales campeones de España de maratón, fueron los mejores españoles en la llegada, decimocuarto y sexta, respectivamente, en una carrera que congregó en la salida a una cifra récord de 18.000 corredores.

La prueba arrancó a las 9.30 horas en el parque de El Retiro para regresar al mismo punto después de cubrir un itinerario a una altitud media de 697 metros, una cota máxima de 740 a su paso por la plaza de Castilla, y la más baja, de 639, en el kilómetro 18.

A un ritmo de tres minutos por kilómetro, en el quinto quedaban en cabeza tres corredores: el marroquí Mohamed Blal, reciente ganador del medio maratón de Getafe, donde reside, y los kenianos Benson Olenakeri y Eliud Kipseren.

Pablo Villalobos, quinto en el maratón de los Europeos de Barcelona 2010, se quedó rezagado con respecto al grupo delantero en el sexto kilómetro y hubo de correr en solitario dos terceras partes de la carrera.

En el duodécimo kilómetro la victoria ya era cosa de dos. Blal perdió terreno y, aunque volvió a alcanzar a los dos kenianos, en el kilómetro 15 se resignó, definitivamente, a seguirlos de lejos.

La última cuesta, de 1.500 metros camino del Paseo de Coches del Retiro, dictó sentencia favorable a Kipserem, un atleta joven pero veterano puesto que comenzó a correr con 16 años.

En la carrera femenina, Jane 1h13:16 logró la victoria en un mano a mano con la portuguesa Ana Días, con la que llegó emparejada hasta los últimos metros.

Vanessa Veiga fue acompañada por su marido, Julio Rey, durante tres kilómetros -"luego, el pobre se quedó atrás", dijo a EFE- y hasta el kilómetro 12 siguió el ritmo de las africanas, hasta que en el 14 se quedó "vacía".

La atleta gallega afincada en Toledo, clasificada para el maratón olímpico de Londres, se encuentra en una primera pase de sus entrenamientos para los Juegos, trabajando en el gimnasio, y acusó la falta de resistencia al final.