El juez imputa al vigilante encargado de controlar las cámaras del Madrid-Arena

  • Se trata del empleado de la empresa Seguriber, Roberto Mateos
  • Mateos reconoció que no vio ninguna avalancha la noche de los hechos
Pabellón Madrid Arena
Pabellón Madrid Arena |Telemadrid

El juez del caso Madrid Arena ha citado a declarar el próximo día 4 en calidad de imputado al empleado de la empresa de seguridad Seguriber Roberto Mateos, responsable del centro de control de cámaras del espacio Madrid Arena, propiedad del Ayuntamiento, en la Casa de Campo.

El Madrid Arena fue escenario de una tragedia el 1 de noviembre de 2012 cuando una estampida humana durante una fiesta ocasionó la muerte a cinco chicas de entre 17 y 20 años.

Mateos ya compareció como testigo el 20 de junio pasado ante el titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Eduardo López-Palop, que investiga la muerte de las cinco jóvenes: María Teresa Alonso, Katia Esteban, Rocío Oña, Cristina Arce y Belén Langdon.

En su declaración judicial, Mateos reconoció que no sabía cuántos aparatos estaban en funcionamiento en el centro de control de cámaras del pabellón y aseguró que no vio ninguna avalancha la noche de los hechos.

Entonces, Mateos expuso que desarrollaba "una vigilancia pasiva", ya que tenía que haber unas personas de Seguriber en el interior del Madrid Arena que le avisaran de lo que estaba pasando para que él enfocara con las cámaras, pero, como no había nadie de Seguriber dentro del recinto, se limitó a comprobar que las cámaras estaban grabando.

Con este empleado de Seguriber, el número de imputados en la causa se eleva a veinticinco personas pertenecientes a Diviertt, Kontrol 34, Seguriber, Madrid Espacios y Congresos, el equipo encargado de la asistencia médica en el evento y la cúpula de Seguridad, Policía Municipal y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid. El magistrado también ha fijado para el día 4 la declaración testifical de la empleada de Seguriber María Soledad Santos.