El colegio del niño que se suicidó dice que no hay pruebas de acoso escolar

  • Cifuentes promete "llegar hasta el final" en el caso de Diego
  • La madre de Diego aboga porque prosiga la investigación en Madrid

El Colegio Nuestra Señora de los Ángeles, al que asistía el niño de 11 años que se suicidó en Leganés tras dejar escrito en una carta que no aguantaba ir más al colegio, subrayó este jueves que una vez realizadas las investigaciones pertinentes y tras varios meses, sigue "sin tener constancia de encontrarse ante un caso de acoso escolar".

En un comunicado, el Colegio Nuestra Señora de los Ángeles, centro concertado situado en el madrileño barrio de Villaverde, indicó que por este motivo "nos producen especial dolor las declaraciones en las que se acusa al centro de no actuar ante el conocimiento de hechos de acoso".

"Nadie del entorno del menor había informado a la dirección de que el alumno no quisiera acudir al centro o de que pudiera tener cualquier conflicto en el mismo", recalcó. En esta línea, los titulares del colegio ruegan a los medios de comunicación el máximo respeto a la intimidad e integridad de los menores alumnos del colegio y del resto de los miembros de la comunidad educativa.

Respecto al otro supuesto caso de acoso escolar al que aluden los medios, el centro subrayó que el fallo de la sentencia del recurso de apelación interpuesto por los representantes legales de la denunciante resultó favorable para el colegio. No obstante, prosigue, "seguiremos trabajando para mejorar los protocolos de actuación de tolerancia cero contra el acoso escolar".

El colegio insiste en que está a disposición de las familias para todo lo que necesiten, y reitera su "consternación ante la trágica muerte" del niño. Asegura además que "desde el primer momento ha acompañado y apoyado a la familia y ha colaborado con la Inspección Educativa, la Policía y otras autoridades, facilitando toda la información solicitada para esclarecer los hechos".

CIFUENTES PROMETE LLEGAR HASTA EL FINAL EN EL CASO EN EL CASO DE DIEGO

La presidenta regional, Cristina Cifuentes, ha reiterado su voluntad de llegar "hasta el final" para aclarar el caso del niño de 11 años que se suicidó denunciando en su carta de despedida haber sufrido acoso escolar, y se ha comprometido a reabrir la investigación para saber si hubo indicios de tal acoso.

Cifuentes ha señalado que su Gobierno no tiene constancia de que hubiera denuncias de este caso previas al suicidio del niño. No obstante, se ha comprometido a reabrir la investigación de la inspección de servicios para ver si había algún indicio para sospechar que estaba sufriendo acoso".

Ha recordado que el próximo lunes se reunirá con los padres del menor, a los que trasladará su cariño y su disposición a ayudarles para "llegar hasta el final", tanto en su caso como en cualquier otro de acoso escolar.

A este respecto, ha instado a los menores que sufran acoso a contárselo a alguien padres, hermanos, amigos o profesores, porque "lo terrible es que cuando no se conoce, es casi imposible actuar".

LA MADRE DE DIEGO ABOGA PORQUE LA INVESTIGACIÓN SIGA EN MADRID

Carmen González, la madre de Diego, el niño de once años que se suicidó en octubre pasado en Leganés, ha insistido hoy en la necesidad de que la investigación judicial pueda ser transferida a un juzgado de Madrid de manera que prosiga el caso y puedan ser analizadas las pruebas tomadas al cadáver.

En declaraciones, la madre ha pedido también a la Comunidad de Madrid y al Defensor del pueblo que "se involucren y lleguen hasta el final" en la investigación del caso de su hijo. Ante la posibilidad de que la jueza del Juzgado de Instrucción 1 de Leganés archive la causa, la madre del niño ha reiterado su deseo de que el caso permanezca abierto hasta llegar a una "conclusión".

González ha destacado la necesidad de que "se controle" el problema del acoso a niños en los colegios, pues -ha dicho- hay casos en este y en otros" centros. La madre se refiere al colegio Nuestra Señora de los Ángeles, un centro religioso concertado, donde estudiaba su hijo, que se suicidó el 14 de octubre pasado al lanzarse desde una ventana de su vivienda, en un quinto piso.

En sus declaraciones, la madre, quien ha reiterado su convencimiento de que el niño sufría acoso, afirma que "no sospechaba nada", aunque desde septiembre pasado, cuando notó que el niño sólo estaba contento cuando no estaba el colegio, decidió consultar a varios especialistas.

Carmen González afirma que un sicólogo conocido habló con el niño pero no logró "sacarle nada" y agrega también que el 30 de septiembre la tutoría del colegio le comunicó que todo era "fenomenal" con respecto a su hijo. La mujer asegura también que en enero de 2015, después de un episodio de pérdida de la voz por parte del niño, le llevó a varios médicos, los cuales dijeron después que había sufrido "un impacto" o "un susto".

Según la madre, días antes de la muerte del niño, este salió un día del colegio "pálido" y con deseo de alejarse rápido del centro educativo, motivo por el cual su madre dice que "algo pasó ese día para que el niño saliese aterrado".