El Ayuntamiento creará una Mesa de la Circulación frente a los atascos

El Ayuntamiento de Madrid creará "en las próximas semanas" una Mesa de Circulación para abordar los temas técnicos, procedimientos y de información sobre los atascos de tráfico, y contempla encargar aplicaciones para móvil que avisen de los mismos. Así lo anunció hoy el director general de Gestión y Vigilancia del Tráfico, Francisco José López Carmona, en la comisión de Medio Ambiente y Movilidad, tras una solicitud de comparecencia formulada por el grupo municipal de Ciudadanos ante los últimos atascos que han colapsado Madrid.

Justificó en parte el atasco del pasado 6 de octubre, por el que se solicitó la comparecencia, indicando que hubo un 10% más de tráfico y se juntó con las 16 incidencias que se registraron en la M-30, 11 de ellas en el arco este de la misma. Dijo que el Ayuntamiento actuó según el protocolo establecido pero situó la solución sólo en "la promoción de una nueva cultura de utilización del vehículo privado" y el fomento del transporte público.

El concejal de C's Sergio Brabazo, y luego el del PSOE José María Dávila, culparon en principio al modelo de ciudad creado por el PP, pero luego propusieron medidas concretas a partir de ahora. Brabazo cree inevitable "meter dinero", unos 100 millones, para aumentar la frecuencia de los autobuses de la Empresa Municipal de Transportes, y que el Consistorio vuelva a entrar en el Consorcio del metro. Además, reclamó que los agentes de movilidad estén en la calle desde antes de las 7.00 horas, cuando se inician los atascos, aunque haya que pagar un plus de nocturnidad. A la Comunidad de Madrid le reclamó el billete intermodal que el Ayuntamiento ya ha pedido en el Consorcio Regional de Transportes.

Además de medidas en favor del transporte público, Dávila sugirió que, para suavizar los atascos, las motos y los taxis queden excluidos de cualquier restricción al tráfico, enlazando con una pregunta anterior en la que el Gobierno municipal y el PP volvieron a discrepar sobre si las motos contaminan más o menos que los coches de gasolina.

Desde Ahora Madrid, Esther Gómez Morante citó atascos de años anteriores para negar que sea una problemática actual, y culpó al modelo urbanístico y de transporte público, al que aseguró que se ha sometido a un acoso y derribo. Esgrimió la apuesta del Gobierno municipal por ocho nuevos aparcamientos disuasorios en la periferia de la almendra central y por comprar nuevos autobuses de la EMT.

El concejal del PP Borja Carabante reprendió a su predecesora por echar la culpa al PP para ocultar su propia "ineficacia" y reivindicó la calidad del metro, buque insignia de las inversiones de la actual portavoz municipal de este partido, Esperanza Aguirre, cuando era presidenta de la Comunidad. Criticó además una supuesta "descoordinación" al estar repartidas las competencias de movilidad entre dos Áreas, y que el Gobierno municipal está utilizando a los ciudadanos como "cobayas" de sus experimentos en este ámbito.

La delegada de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, atribuyó estas críticas al "desconcierto" del PP por estar en la oposición después de muchos años, y habló de "imposibilidad real" de absorber el tráfico, que solo pude subsanarse con una colaboración entre administraciones, porque la Comunidad tiene competencia en los accesos a la ciudad y el metro. Además, dijo que la gestión diaria del tráfico, la operativa de transportes, estaï"en la misma indefinición" en la que la dejó el Gobierno del PP, entre la Policía Municipal y los Agentes de Movilidad, pues el nuevo de Ahora Madrid sólo ha modificado la estrategia urbanística, no la ejecución diaria.

Por último, Sabanés dijo que el PP confunde interesadamente las Áreas de Prioridad Residencial, con la libertad de los conductores y las motos, sobre las que insistió en que sólo se les prohibirá circular en días muy puntuales de contaminación persistente durante unos días.