La familia de Álvaro Ussía pide que el juicio sirva para hacer justicia y no sea un espectáculo

  • Conformado el jurado popular para el "caso Ussía" tras 3 horas de selección

La declaración de los tres acusados de la muerte de Álvaro Ussía, el joven de 18 años que falleció en 2008 a las puertas de la discoteca el Balcón de Rosales (distrito Moncloa-Aravaca), ha sido aplazada hasta el miércoles después de que las partes hayan tardado hoy más de tres horas en conformar el tribunal popular que les juzgará. La presidenta de la sección 23 de la Audiencia Provincial de Madrid, María Riera, ha aplazado la declaración prevista de los procesados, -Antonio Sánchez, alias "Pitoño", David Alonso y David Sancio-, dada la lentitud con la que se ha llevado a cabo la selección de los miembros del jurado popular.

La elección de las once personas -dos de ellas como suplentes- que tendrán que dar el veredicto en este juicio que concluirá el día 18 se ha realizado con las preguntas de las partes a los treinta y cuatro ciudadanos convocados. Tanto las acusaciones -la particular, la popular, ejercida esta última por la Asociación Sandra Palo para la Defensa de las Libertades, y la Fiscalía- como las defensas han recusado a ocho miembros del jurado, el límite que permite la ley.

Por tanto será este miércoles cuando tendrá lugar la declaración de los procesados. Está previsto que el primero en declarar sea "Pitoño", el único en prisión desde el momento del suceso, ocurrido el 15 de noviembre de 2008, y que se enfrenta a 15 años de cárcel como autor de un delito de homicidio con agravante de abuso de superioridad.

13 AÑOS DE PRISIÓN

Para David Alonso y David Sancio se solicitan 13 años de prisión por un delito de homicidio en concepto de cooperadores necesarios con la agravante de abuso de superioridad.

Las defensas de los tres, sin embargo, piden su absolución.

Mientras la abogada de "Pitoño", Miriam Vergara, no ha querido hacer comentarios a la prensa, las defensas de los otros dos acusados han señalado que sus clientes de encuentran tranquilos.

David Sancio "está tranquilo y esperanzado en que se aclaren los hechos", ha comentado su abogado, Raúl Velázquez, quien ha considerado que el hecho de que el juicio se celebre con jurado no es beneficioso para su defendido porque los integrantes del mismo pueden recibir "información ajena al procedimiento".

La abogada de David Alonso, Ana Ruiz Velilla, considera que el tribunal popular no se dejará "influir por la prensa" y ha resaltado que el joven no participó en los hechos de los que se le acusan, por lo que confía en un veredicto de no culpable.

EL JUICIO ESTARÁ DENTRO, NO FUERA

"El juicio está dentro, no fuera", ha manifestado escuetamente Pedro Colina, el abogado de la familia de la víctima. Ni la madre ni los hermanos de Álvaro han acudido al comienzo de la vista oral, y tampoco está previsto que asistan los doce días marcados para el juicio.

Los hechos a juzgar, que provocaron que el Gobierno regional cambiara la legislación sobre los porteros de las discotecas y clausurara el "Balcón de Rosales", se remontan a la madrugada del 15 de noviembre de hace tres años.

Según el escrito provisional del Ministerio Público, Álvaro Ussía fue expulsado de la citada discoteca a consecuencia de un leve incidente y, una vez en el exterior, se inició un cruce de insultos entre él y los tres acusados, que trabajaban como porteros en esa discoteca.

Uno de ellos, Antonio Sánchez, valiéndose de una zancadilla, tiró a Álvaro al suelo boca arriba, a continuación se arrojó fuertemente sobre él, tirándose de rodillas sobre su pecho y manteniéndose así mientras le seguía golpeando, provocándole una rotura traumática del corazón.

Los otros dos acusados, conociendo que las acciones de su compañero comportaban un grave peligro de muerte para Álvaro, impidieron que sus amigos y otras personas acudieran en su ayuda e incluso le propinaron patadas.

Álvaro Ussía fue asistido por el Samur y trasladado al Hospital Clínico San Carlos, donde falleció a las 7 de la mañana por la referida rotura traumática del corazón.