Cifuentes pide castigo para los delitos de odio en el homenaje a las víctimas del holocausto

  • La Asamblea de Madrid recuerda a las víctimas del nazismo
  • Cristina Cifuentes pide "respeto a la diferencia" y que los políticos "sean ejemplo de tolerancia"

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, pidió"respeto a la diferencia y castigo a los delitos de odio", en el acto de homenaje a las víctimas del Holocausto celebrado en la Asamblea de Madrid.

Agregó que hay que estar "alerta" ante estas conductas que persigue el Código Penal y se refirió a la necesidad de que "los educadores insistan en el respeto a la diferencia, los políticos y los responsables públicos sean ejemplo de tolerancia y los jueces y fiscales utilicen los recursos que la ley ofrece para castigar los delitos de odio".

La presidenta dijo que "no se puede pasar por alto ninguna injuria o gesto que trivialice lo que fue esta infamia" ni "estigmatizar a nadie por su origen, su fe o sus ideas".

"No hay desafío pequeño ni palabra inofensiva", manifestó Cifuentes, quien alertó sobre "el fantasma del antisemitismo, el fanatismo religioso y la intransigencia ideológica, que siguen planeando sobre la Europa de las libertades, a veces bajo nuevas formas especialmente crueles, como el terrorismo".

Este simbólico acto, en el que se recuerda a las víctimas coincidiendo con la fecha en la que fue liberado el campo de concentración de Auswichtz, hace 71 años, es organizado en la Asamblea regional por la comunidad judía de Madrid desde el año 2000.

"El significado de esta ceremonia es oponer frente a la barbarie irracional de los asesinos la capacidad de reflexionar y relatar aquello que parece inconcebible e innombrable", añadió.

PALOMA ADRADOS RECUERDA A LOS "HOMBRES BUENOS" QUE SE JUGARON SU PROPIA VIDA PARA LUCHAR CONTRA LA IGNOMINIA

La presidenta de la Asamblea de Madrid, Paloma Adrados, dijo que "la shoah, lo que los nazis llamaron con eufemismo la solución final, no fue la demencial idea de un lunático visionario ni la semilla del odio que germina rápidamente en un conjunto de mentes enfermas, fue un proyecto largamente planeado y fríamente ejecutado con el fin último de borrar al pueblo judío de la faz de la tierra".

Consideró necesario, "en un día como hoy, recordar a los justos, a los hombres buenos que, en aquellos tiempos oscuros, se jugaron mucho más que su propia vida para luchar contra la ignominia". "Para nuestra vergüenza, la shoah ocurrió aquí, en el corazón de una Europa castigada, sí, pero en el seno de una sociedad culta, moderna y avanzada", manifestó.

El acto, presentado por Diego Carcedo, presidente de la Asociación de Periodistas Europeos, contó también con la participación de Moshé Haelión, superviviente del Holocausto; Yinam Cohen, ministro consejero de la Embajada de Israel, y David Hatchwell, presidente de la Comunidad Judía de Madrid.