La Delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha lamentado que, una vez más, "una manifestación pacífica haya acabado de forma muy violenta".
En declaraciones a Efe ha dicho que los incidentes han comenzado cuando aún la manifestación no había terminado, cuando varias personas han "agredido brutalmente" a policías nacionales en la zona de Colón, lanzando botellas, piedras, bengalas y otros objetos.
La delegada ha relatado que se han producido destrozos en entidades bancarias y en bares del Paseo de Recoletos, como el Café Espejo, lo que ha calificado como "una brutalidad sin precedentes".
Ha explicado que la Policía ha tenido que defenderse de los ataques de algunos de los manifestantes. Ha especificado que un policía ha resultado herido más grave que el resto, porque ha recibido patadas en la cabeza hasta quitarle el casco.
Este policía, según fuentes de la Delegación del Gobierno, fue trasladado al Hospital Gregorio Marañón ya que perdió el conocimiento y ha quedado ingresado en observación.
Cifuentes ha recordado que la Delegación del Gobierno contaba con informes que alertaban de la posible presencia de personas muy violentas en la manifestación y "lamentablemente esto se ha confirmado", por lo que ha expresado su apoyo a la intervención policial, "que ha logrado restablecer el orden y el apoyo a los policías heridos".
Ha insistido en que se trataba de una manifestación pacífica en la que se produjeron incidentes aislados protagonizados por personas muy violentas.
Ha confirmado que ha habido un intento de acampada en el Paseo de Recoletos,en el que se han llegado a instalar algunas jaimas, pero que la Policía las ha desmontado en poco tiempo.
Fuentes de la Delegación del Gobierno de Madrid han relatado a Efe que uno de los policías recibió una puñalada en el chaleco protector, aunque no le ha causado heridas.
La misma fuente ha contado que la terraza del Café Gijón, en el Paseo de Recoletos, ha sufrido daños.
Por su parte, el secretario general de la Confederación Española de Policía (CEP), Ignacio López, ha anunciado que estudia exigir responsabilidades administrativas y penales a los organizadores de las 'Marchas por la Dignidad' por los policías heridos en los altercados en la Plaza de Colón.
