Chueca, un barrio que no se entiende sin el colectivo LGTBi

Chueca es un barrio que ya no se entiende sin el colectivo LGTBi. Es allí donde arranca, a finales de los 70, la lucha por los derechos de los homosexuales en Madrid. En 1978 tuvo lugar la primera manifestación del colectivo en la capital. La marcha acabaría en la Puerta del Sol, pero todos acudieron después a Chueca. Era su refugio. Allí fueron surgiendo bares y locales, en los primeros años clandestinos, donde escapar de la represión.

El colectivo gay logró en menos de una década transformar las calles degradadas y marginales de una barrio castigado por las drogas en los 70, en una zona abierta, viva y cosmopolita, epicentro de las manifestaciones del Día del Orgullo. Chueca, en ese sentido, ha significado un claro ejemplo de la conquista de espacios y derechos que año a año ha logrado el colectivo LGTBi en nuestro país.

Una lucha en busca de visibilidad y la normalización, en que la vida de Chueca, convertido en el epicentro del Orgullo, ha estado ligada a la historia del colectivo.