Bomberos de la Comunidad honrarán hoy a la Virgen de la Paloma en su festividad

  • La participación es voluntaria para los efectivos que no tengan guardia en esa fecha
bomberos_paloma_300
Los bomberos honrarán a la Virgen de la Paloma |archivo

Una representación del Cuerpo Regional de Bomberos desfilará hoy lunes en la procesión con la que se honra a la Virgen de La Paloma. Los bomberos de la Comunidad se suman así, un año más, a la tradición ya arraigada de acompañar a los bomberos del Ayuntamiento de Madrid en la tradicional celebración, y desfilarán por las calles del centro histórico de la capital acompañando la imagen de la Virgen, ha informado la Consejería de Presidencia y Justicia.

Los bomberos de la Comunidad de Madrid desfilarán con su traje reglamentario de parque, incluido el casco que utilizan para las intervenciones. La participación es totalmente voluntaria y acuden profesionales con destinos en distintos parques con la única condición de que ese día estén libres de servicio.

Aunque los bomberos del Ayuntamiento de Madrid son los únicos encargados de descolgar el cuadro que representa la imagen de la Virgen de la Soledad, conocida popularmente como 'Virgen de la Paloma', de su habitual emplazamiento en la Iglesia de San Pedro El Real, en Madrid capital. Posteriormente son los mismos bomberos madrileños los que instalan el cuadro de la Virgen en las andas con las que procesiona por las calles madrileñas.

Los bomberos madrileños escoltan en todo momento la procesión y, a su paso por la Puerta de Toledo, se realizan diversas exhibiciones, tales como pasos de ríos realizados desde autoescalas desplegadas a gran altura, rappel y otras maniobras.

Desde hace ya más de una década los bomberos de la Comunidad se han sumado a estas celebraciones, en un día de fiesta y confraternización con sus compañeros municipales. Una vez concluido el desfile procesional, todos los bomberos participantes se reúnen en el parque de los bomberos del Ayuntamiento de Madrid situado junto a la Puerta de Toledo para conmemorar la celebración.