El festival 'Amanecer Bailando' desata las quejas de los vecinos de Alcorcón y Móstoles

  • El ruido, el botellón y la suciedad centran las protestas contra la alcaldesa mostoleña Natalia Posse
El festival  'Amanecer Bailando' desata las quejas de los vecinos de Alcorcón y Móstoles
El festival 'Amanecer Bailando' desata las quejas de los vecinos de Alcorcón y Móstoles

Los habitantes de Móstoles y sus vecinos de Alcorcón han comenzado ya a quejarse a través de las redes sociales por la celebración del festival 'Amanecer Bailando' en el parque Prado Ovejero; el ruido, el botellón y la suciedad centran las protestas contra la alcaldesa mostoleña Natalia Posse (PSOE).

Fotos y vídeos, en los que se puede comprobar el volumen del sonido que se escucha desde las casas, acompañan las quejas por este festival de música electrónica, que no parará hasta las 10 de mañana, domingo, tras 17 horas de música ininterrumpida repartida en cuatro escenarios temáticos.

Vibración en los cristales, "chunda chunda", fotos de jóvenes orinando en la vía pública o quejas por un botellón que se extiende más allá del parque Prado Ovejero protagonizan los mensajes en los que se cuestiona la acción del Gobierno de Posse.

El Ayuntamiento de Alcorcón, gobernado por el popular David Pérez, ofrecerá a los vecinos del barrio de Fuente Cisneros un servicio de atención y asesoramiento ante las molestias por la celebración del festival a través de los servicio de Consumo, después del intento fallido de que el festival se suspendiese de forma cautelar por exceso de decibelios.

Amanecer bailando ha arrancado con normalidad y sin aglomeraciones en los accesos tras un tenso verano lleno de enfrentamientos por la ubicación del macroevento, en el que se darán cita unos 60 artistas de primer nivel en la música electrónica y urbana.

Inicialmente, el festival iba a celebrarse en el Parque Natural del Soto, pero ante las quejas vecinales, ecologistas del municipio y grupos políticos -incluido Ganar Móstoles, socio del Gobierno municipal del PSOE junto a IUCM-LV- se trasladó al Prado Ovejero, una decisión que acentuó el conflicto, ya que Alcorcón ha llevado la decisión ante la Fiscalía de Medio Ambiente con la intención de que suspenda cautelarmente el macroevento.