Hasta 96 familias malviven en el histórico asentamiento de las Sabinas de Móstoles.
Por orden judicial se ha cortado el agua y la luz. Y con estas altas temperaturas, la situación de niños y algunas personas enfermas es dramática.
No tener luz significa no tener agua. A oscuras, sin lavadora y sin nevera. "La comida comprarla al día y por la noche, con velas" asegura una vecina.
Un problema serio para una mujer diabética. El ayuntamiento ha llevado generadores mientras realiza gestiones con Iberdrola.
Será una solución de emergencia. Los patriarcas del poblado de las Sabinas se están reuniendo con el ayuntamiento para que les ayuden a conseguir luz y contadores.
