El colector de Abroñigal permitirá aliviar del riesgo de desbordamiento en el resto de la red madrileña

  • Tendrá capacidad para llevar 40 metros cúbicos de agua por segundo
  • Gallardón recorre los 2,2 kilómetros de túnel, desde Puente de Vallecas a Moratalaz, del colector

El nuevo colector de Abroñigal tendrá capacidad para llevar 40 metros cúbicos de agua por segundo y permitirá así aliviar al resto de la red de aguas de lluvia y residuales cuando haya riesgo de desbordamiento, aumentando la capacidad en un 40 por ciento. Así se lo han explicado al alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón durante una visita realizada este miércoles a las obras, en la que ha estado acompañado por la delegada de Medio Ambiente, Ana Botella, y por el presidente de Dragados, Florentino Pérez.

En la visita, Gallardón ha realizado el recorrido de 2,2 kilómetros de túnel --que va desde Puente de Vallecas a Moratalaz-- en uno de los trenes que se utilizan para transportar material. Así ha podido ver cómo la excavadora Inés --de 215 toneladas y 82 metros de largo-- perfora la tierra y coloca de forma automatizada las dovelas, que van numeradas y quedan encajadas de forma hermética. Este sistema permite mejorar la seguridad de los trabajadores, tanto porque hay menos hombres en el túnel en cada momento como porque reduce el riesgo de desprendimientos de tierra, según ha explicado Pérez.

El túnel tiene 3,40 metros de diámetro y alcanza una profundidad de 30 metros y, según el primer edil, será una "garantía de que Moratalaz no volverá a sufrir" inundaciones por colapso de la red, ya que a este colector verterán los otros tres ramales con los que está conectado cuando vayan "a tope".

Las obras de perforación comenzaron en febrero de 2010 y el buen ritmo de los trabajos ha permitido reducir en tres meses su duración --se han excavado hasta 30 metros diarios de media, con picos de 50 metros en algunas jornadas--, por lo que ya sólo queda un pequeño tramo que horadar con la tuneladora y unos cien metros más que se excavarán a mano.

De esta manera, el nuevo colector podrá ponerse en marcha el próximo 8 de octubre, según ha indicado a Europa Press el director general de Infraestructuras de Agua, Pedro Catalinas. El presupuesto del proyecto, que incluye también dos colectores tributarios en la avenida de Moratalaz y en Doctor García Tapia, alcanza los 32 millones de euros. Además, en la segunda mitad del año el colector estará conectado al by-pass de Abroñigales para derivar sus aguas, en caso necesario, al estanque de tormentas del mismo nombre.

Con todo esto se conseguirá "evitar el colapso de la red existente que llegó a producirse puntualmente y que corría el riesgo de convertirse en algo no esporádico y de generar molestias muy importantes a los vecinos, impidiendo además cualquier nueva autorización del Ayuntamiento", según el primer edil.

De hecho, Botella ha aprovechado también para subrayar que el sistema de construcción empleado en este proyecto ha permitido "mejorar mucho la seguridad" de los trabajadores (a pesar de que trabajan en tres turnos) y reducir el ruido que sufren los vecinos, insonorizando el túnel y cambiando los avisos sonoros por luces, entre otras medidas.

INFRAESTRUCTURAS "INVISIBLES PERO IMPRESCINDIBLES"

Durante el acto, Gallardón ha subrayado que este tipo de infraestructuras son "invisibles pero imprescindibles", no sólo para dar respuesta a necesidades actuales sino, sobre todo, para garantizar su viabilidad en el futuro. De hecho, ha subrayado que Madrid se ha convertido en un "referente" en este tipo de actuaciones, que también contribuyen a mejorar la competitividad y a atraer inversiones; y ha afirmado que las mejoras en la red de agua tiene beneficios incluso para ciudades como Toledo o Lisboa.

Por ello, su equipo ha destinado cerca de 1.200 millones de euros a este tipo de proyectos en los ocho años en que Gallardón ha dirigido el Ayuntamiento. En esta cantidad se incluyen, por ejemplo, los 122 millones de euros aportados por los Fondos de Cohesión de la Unión Europea. Así se ha conseguido que la capital cuente con una red de alcantarillado de 4.500 kilómetros, con ocho estaciones depuradoras que tratan anualmente más de 310 millones de metros cúbicos de aguas residuales y con 37 estanques de tormentas que pueden recibir 1,3 millones de metros cúbicos.

Además, se han construido 150 kilómetros de "una de las redes de agua regenerada más extensa de Europa, que ha multiplicado por seis su capacidad de ahorro hasta situarse en los 6 millones de metros cúbicos al año, equivalentes al consumo de una ciudad de 80.000 habitantes".

Y todo partiendo de una red que comenzó a construirse hace tres siglos, con 1,8 kilómetros de extensión, y que fue ampliada con los primeros colectores en el siglo XIX. Además, en 1950 se hizo la primera depuradora de aguas residuales y, en 1978, se aprobó el Primer Plan de Saneamiento Integral, siendo precisamente Florentino Pérez responsable de esta materia como concejal de la capital.