El alcalde de Fuenlabrada declara al juez que "jamás" acosó a un extrabajador

  • Imputado por prevaricación

El alcalde de Fuenlabrada, Manuel Robles (PSOE), ha declarado en el Juzgado de Instrucción número 4 de la localidad como imputado por presuntos delitos contra la integridad moral, prevaricación y de lesiones y ha asegurado que "jamás" acosó al extrabajador que ha presentado la demanda.

El pasado mes de noviembre, según el auto al que tuvo acceso Efe, Manuel Robles fue imputado por mantener "una actitud hostil" hacia el demandante, Ricardo de Montes Power, al que en el año 2006 apartó de su puesto de trabajo -coordinador de Personal- y este fue defenestrado a un puesto sin funciones, según la acusación.

Posteriormente, según el auto, el alcalde desobedeció un auto del 20 de noviembre de 2009 del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de Madrid e inadmitió una solicitud de adaptación a su nuevo puesto de trabajo "compatible con su estado de salud y la incapacidad que le fue reconocida".

A este respecto, a la salida del juzgado, Robles ha asegurado a los medios de comunicación que esta sentencia "sí se cumplió por parte del Ayuntamiento" y ha señalado que ha aportado toda la documentación que así lo demuestra al juez.

"Este caso ha ido siempre por la vía laboral y el señor Ricardo de Montes perdió todas las denuncias que presentó, a excepción de una. Pero un auto del Tribunal Superior de Justicia indica que el Ayuntamiento cumplió con la vuelta a su puesto de trabajo. Yo con este señor nunca he tenido ninguna situación de acoso ni jamás he ordenado nada", ha argumentado.

El alcalde de Fuenlabrada ha aseverado que se trasladó de puesto a De Montes "con los informes técnicos oportunos" y que su destino fue el departamento de Compras y Contratación, que ha calificado como "el más importante de un Ayuntamiento", lo que evidenciaría la "plena confianza hacia ese letrado".

Según fuentes cercanas al demandante, Ricardo de Montes se negó a aprobar el nuevo organigrama de directores generales del Ayuntamiento cuando Fuenlabrada empezó a regirse por la Ley de grandes ciudades, ya que consideraba que "no se ajustaba a la Ley". Fue entonces, según estas fuentes, cuando empezaron "las presiones y las hostilidades" hacia el letrado.

"Le pidió al alcalde reiteradamente que los puestos directivos del Ayuntamiento no fueran ocupados por personas designadas a dedo", han apostillado a Efe las mismas fuentes. Sobre este punto, Robles ha afirmado que el juez "prácticamente" no le ha preguntado sobre los nombramientos de los directos generales.

"Todos los nombramientos pasaron por Junta de Gobierno, por el pleno y se aprobaron por mayoría absoluta, incluidos los partidos de la oposición. Estaban técnicamente perfectos, informados por el secretario y la intervención del Ayuntamiento de que había consignación presupuestaria", ha detallado.

Ricardo de Montes padece una enfermedad coronaria por la que tuvo que ser operado y "a causa de todas estas presiones, hostilidades y acoso por parte de sus superiores empeoraron seriamente sus problemas de salud", ha manifestado hoy su abogado, José María Ruiz.

"Antes de todos estos hechos De Montes ya había tenido un problema de enfermedad por el que había tenido bajas continuadas y permanentes en el Ayuntamiento. Nunca hubo ninguna situación de acoso por mi parte, ni por parte de ningún miembro del Ayuntamiento y ha quedado suficientemente claro ante su señoría", ha reiterado el regidor de Fuenlabrada.

La defensa de Manuel Robles ha solicitado el sobreseimiento y el archivo de la causa, mientras que la acusación ha pedido la apertura de juicio oral y aportar más pruebas documentales y testificales.