San Lorenzo se despide de los madrileños para dar paso a las fiestas de la Paloma

Las fiestas de San Lorenzo, que sucedieron a las de San Cayetano, se despiden hoy para dar paso mañana a las de la Paloma.

La Virgen de La Paloma, muy venerada por los madrileños y patrona de los Bomberos de Madrid, pondrá punto final a una sucesión de fiestas que han llenado de color y ambiente el centro de la ciudad.

La Virgen de La Paloma está pintada en un cuadro, lienzo que representa a la Virgen de la Soledad, encontrado a finales del siglo XVIII por unos niños y que una vecina, Isabel Tintero, recuperó y colocó en el portal de su casa.

La devoción de Tintero por esta imagen llegó a sus vecinos y se extendió el rumor de los milagros que hacia.

Se dice que María Luisa de Parma fue muy devota tras obtener de la virgen la curación de su hijo, el futuro Fernando VII.

Tal era la peregrinación de gente a la casa de Tintero que se iniciaron los trámites para construir una capilla en la calle La Paloma y de ahí la Virgen de la Soledad pasó a llamarse por el nombre de la calle donde se alojaba.

Par celebrar las fiestas, Las Vistillas acogen las actuaciones Aldeskuido, Kike Supermix, Alejo Stivel y La Pegatina, ha informado hoy el Ayuntamiento.

No faltarán los bailes con orquestas, el teatro en la calle, los concursos típicos de mantones, de trajes castizos y de la mejor tortilla de patatas, entre otros.

La tradicional Salve a la Virgen de La Paloma se celebrará todos los días a las doce de la noche en la plaza de la Paja.

El día 15 hay una amplia programación en honor a la Virgen que comenzará a las 10 de la mañana con la ofrenda floral en la fachada del Colegio La Salle-La Paloma junto a la entrada de la iglesia.

A la una de la tarde se celebrará la misa y a las dos y cuarto el piquete del Cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid procederá al tradicional descenso del cuadro de la Virgen.

A las ocho de la tarde se celebrará la procesión que recorrerá las calles de Isabel Tintero, Gran Vía de San Francisco, Puerta de Toledo, calle de Toledo, plaza de la Cebada, Carrera de San Francisco y Calatrava, para finalizar por la calle de La Paloma hasta regresar de nuevo a la iglesia.