La Policía destapa una red de fraude de bebidas alcohólicas y requisa 355 botellas

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Policía Municipal |Archivo

La Policía Municipal ha destapado en la capital una red de fraude de bebidas alcohólicas y ha requisado 355 botellas, ha informado el Ayuntamiento de Madrid en un comunicado. En la operación se han intervenido 355 botellas de diferentes bebidas y se ha imputado a los responsables de distribución de bebidas por un delito de fraude fiscal. Los autores se enfrentan a un delito de estafa, fraude fiscal y contra la propiedad industrial.

La investigación, bautizada como operación Siva, comenzó cuando agentes de Ciudad Lineal fueron informados de que se podía estar distribuyendo bebidas alcohólicas posiblemente adulteradas en diversos locales de la capital Agentes policiales junto con técnicos de Sanidad y Consumo de la Junta Municipal de Centro y de la Agencia Tributaria realizaron las primeras visitas para comprobar la situación.

El volumen de negocio fraudulento podría alcanza el cuarto de millón de euros anual. Tras las investigaciones iniciales, se programan 37 inspecciones en materia de bebidas alcohólicas en locales de ocio y restauración de Madrid, levantándose un total de nueve actas de incautación, en las que se intervinieron 355 botellas de diferentes bebidas alcohólicas.

El análisis de las botellas retiradas ha permitido comprobar que las bebidas no son perjudiciales para la salud pública, pero en ningún caso cumplen ni en contenido, composición, procedencia del alcohol y graduación alcohólica con las especificaciones de su etiquetado. Ninguna de las botellas incautadas tiene los precintos fiscales de la Hacienda Pública.

A la vista de que un gran número de las botellas intervenidas son de tequila, bebida con denominación de origen protegida por convenios internacionales, los agentes de Policía Municipal contactaron con el Consulado de México y con el Consejo Regulador del Tequila (CRT).

Certificando con ello que la bebida incautada no cumple la reglamentación de certificación del Consejo Regulador ni esta autorizada su distribución, por lo que a la lista de delitos se une la de un posible delito contra la propiedad industrial.

En las tareas de investigación se ha imputado a los responsables, que fueron sorprendidos mientras se desplazaban con una camión cargado con 77 cajas de bebidas, de la distribución de las bebidas un delito de fraude fiscal. La comprobación de los movimientos mercantiles de los imputados durante los tres últimos años ha destapado que el volumen de negocio podría superar el cuarto de millón de euros al año.