Miles de madrileños y visitantes; niños, adultos y ancianos, se han dado cita en las calles más céntricas de Madrid para presenciar el tradicional desfiles de Carnaval, que este año ha tenido un protagonista de tronío, don Quijote de la Mancha, en todo momento acompañado por su fiel escudero, Sancho.
Desde la Puerta de Madrid, en el Retiro, hasta la plaza de Cibeles, la comitiva ha recordado durante su trayecto el cuarto centenario de la Segunda Parte del 'Quijote' de Miguel de Cervantes, para deleite de los asistentes, que se han agolpado en los márgenes de la carretera e incluso se han subido a las vallas del Parque del Retiro para presenciar el espectáculo.
Sin duda el más aclamado ha sido don Quijote que, junto a Sancho y sus monturas, han abierto el desfile al trote en el centro de unas esferas metálicas que no han dejado indiferentes a nadie.
"El desfile está muy bien, tiene mucha calidad, pero me esperaba más, ha sido muy corto, me parece increíble que estando en Madrid sólo haya durado dos minutos", ha explicado a Efe Laura, quien no se había dado cuenta de que a continuación de Don Quijote y Sancho, faltaba por pasar el grueso de la comitiva.
Y es que diversas compañías teatrales, asociaciones y fundaciones han acompañado con música y disfraces la travesía de los personajes más ilustres de la literatura española.
Precisamente "una buena empapada" de cultura española, como él mismo ha dicho, ha vivido Íñigo, un joven mexicano que no ha perdido detalle del desfile ya que "era algo desconocido" para él.
"No es algo que hubiéramos visto antes", ha indicado Íñigo, que lucía disfraz al igual que sus amigas, aunque no tan bien trabajado como los del desfile.
"La escenografía y sus disfraces están muy bien", ha reconocido el joven sin perder ojo de lo que acontecía al otro lado de la valla.
Hasta la climatología ha respetado la festividad de Don Carnal, quien parece haber mediado para que tanto el pregón, como el desfile se desarrollaran sin inclemencias meteorológicas más allá del frío habitual en este época del año.
Todos han disfrutado con las carrozas, fanfarrias y espectáculos que tocarán a su fin en Cibeles con una exhibición pirotécnico-musical que a buen seguro que iluminará el cielo de Madrid y estimulará los oídos de los asistentes.
Pese al gran despliegue de este sábado de Carnaval, tanto en pregón como en cabalgata, los fastos continúan y los más trasnochadores podrán empezar a disfrutar del ambiente -si aún quedaba alguno que no comenzó ayer- durante la noche.
Y es que este año tampoco falta a su cita con Madrid el tradicional concurso de disfraces y baile de máscaras que organiza el Círculo de Bellas Artes y que deslumbra en la oscuridad de la noche desde estancias tan emblemáticas del recinto como Salón de Baile, la Sala de Columnas o la Pecera.
Si a las seis de la tarde el pregón de la capital corrió a cargo de Carlos Iglesias -un Sancho Panza idóneo para preludiar un Carnaval en honor a Don Quijote- por la noche coge el testigo en el Círculo otro humorista algo más canalla, Joaquín Reyes, que inaugurará el Carnaval al Desnudo de tan emblemática institución.
Por si alguien soporta bien los excesos que pregona Don Carnal, mañana habrá lugar para la risa con las chirigotas que para la ocasión ha reclutado el bueno de Práxedes, conocido como el "murguero mayor de Madrid", que espera a todo el mundo desde las 12.00 horas en la Plaza de la Villa.
Así que esta noche no hay excusas para ponerse el disfraz, cubrirse la cara y, una vez que Don Quijote y Sancho se retiren a sus aposentos, salir a disfrutar de la noche de Carnaval.
