Manzanares se prepara para la excavación arqueológica de su castillo viejo

Manzanares se prepara para la excavación arqueológica de su castillo viejo
Manzanares se prepara para la excavación arqueológica de su castillo viejo |fotopaises.com

El Ayuntamiento de Manzanares El Real va a iniciar los trabajos preparatorios para la excavación arqueológica de su Castillo Viejo, cuyos restos van a ser recuperados y analizados, tras décadas sin atención, para que el municipio recupere “buena parte de su historia” y “algún secreto por descubrir”.

Las tareas comienzan con la limpieza y adecuación de la superficie, para posibilitar que en los próximos meses arranquen los primeros estudios de superficie con georradar y, posteriormente, comenzar las excavaciones arqueológicas ya previstas, según indica el consistorio en una nota.

La localidad, que es especialmente conocida por albergar el Castillo de los Mendoza, de construcción posterior, se ha propuesto recuperar esta otra fortaleza, o las ruinas que queden, de cuyo origen existen varias teorías, aunque fue citado por primera vez a mediados del siglo XIV.

El Castillo Viejo contaba con tres torres circulares y una cuadrada en sus esquinas, con un estilo constructivo de inspiración mudéjar y encintados de ladrillo.

Sin embargo, los estudios realizados apuntan a que, durante la construcción del Nuevo Castillo, el de los Mendoza, alrededor de 1475, el anterior fue desmontado para aprovechar sus materiales y evitar su ocupación, según explica el Ayuntamiento.

Patrimonio historico

Pese a todo, subrayan que los restos de esta edificación forman parte del patrimonio histórico y cultural de Manzanares El Real, hasta el punto de que está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) de la Comunidad de Madrid desde 1985.

Por ello, el ayuntamiento adquirió en 2019 los terrenos para comenzar, junto con la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid, una serie de trabajos que concluyan con la excavación arqueológica de lo que fue el edificio y su entorno.

Durante el mes de agosto se desbrozará el cementerio viejo y los terrenos aledaños del castillo, trasplantando parte de la vegetación que pueda verse afectada; para que en septiembre pueda comenzarse el estudio con georradar, a cargo de técnicos de la Universidad Complutense de Madrid (UCM).