Madrid no declarará zonas tensionadas de alquiler porque cree que elevaría más los precios

  • El consejero de Vivienda considera que se está "interviniendo el mercado"
  • "Los ejemplos y las prácticas que ha habido a este respecto no han funcionado, han sido fallidos", ha indicado Jorge Rodrigo

El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Jorge Rodrigo, ha subrayado que el Gobierno encabezado por Isabel Díaz Ayuso no declarará "ninguna zona tensionada" en la región, al considerar que se está "interviniendo el mercado" y "lo único que conllevaría era que subirán todavía mucho más los precios".

En el caso de la capital, el precio medio del alquiler es de 18,30 euros el metro cuadrado, un 14% más que el año pasado. Desde el sector apuntan a que el tope de precios de la Ley de Vivienda estatal subiría más el alquiler.

El Gobierno central ha establecido un índice de precios de referencia para limitar los precios del alquiler en áreas tensionadas, con un rango de precios que establecerá precios máximos y mínimos para una vivienda a partir de las características de la misma.

El tope a los alquileres,  motivo de disputa entre la Comunidad y Getafe
El tope a los alquileres, motivo de disputa entre la Comunidad y Getafe
El tope a los alquileres, motivo de disputa entre la Comunidad y Getafe

El tope a los alquileres, motivo de disputa entre la Comunidad y Getafe

En declaraciones a los medios durante un acto en la Consejería, el máximo responsable madrileño en temas de Vivienda ha recalcado que el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso "en ningún caso" aprobará "ningún tipo de zona tensionada de ningún municipio de la Comunidad" y ha recordado, en este sentido, que "los ejemplos y las prácticas que ha habido a este respecto no han funcionado, han sido fallidos". Entre ellos, ha citado los ejemplos de Barcelona, París, Berlín o, más recientemente, en algunos municipios de Escocia.

En esta línea, ha recordado, además, que el Gobierno regional tiene recurrido ante el Tribunal Constitucional la Ley de Vivienda que aprobó "el Gobierno de Pedro Sánchez con el apoyo de los independentistas y los nacionalistas" y ha insistido en el rechazo al considerar que se interviene en el mercado y conllevaría una subida mayor de los precios.