Como viene siendo tradicional, cada vez que se acerca el 22 de diciembre, las puertas de la administración madrileña de 'Doña Manolita' congrega a decenas de personas que guardan colas kilométricas para comprar un boleto de la Lotería de Navidad, cuyo premio aumenta este año hasta los 400.000 euros por décimo.
En declaraciones a Europa Press Televisión, Concha Corona, encargada de la administración, reconoce que el aumento de la cuantía de 'El Gordo' es uno de los motivos por los que no disminuye el número de compradores. La actual situación de crisis económica también parece ser un aliciente para jugar a los juegos de azar.
"Ahora, por ejemplo, tenemos más afluencia de público, pero las ventas son las mismas que otros años porque si antes se llevaban un billete, ahora se llevan medio o dos décimos, uno. Pero lo vuelven a intentar, todos los esperamos", explica Concha, quien reconoce que viven estos días con "mucha ilusión" a la espera de que caiga algún premio.
Números como el 13 o el 11 están ya agotados en la administración más emblemática de España, pero no son los únicos demandados; este año los terminados en la fecha del cumpleaños del entrenador del Real Madrid, José Mourinho, o la fecha de boda de la Duquesa de Alba están siendo también muy reclamados.
"REPARTIMOS ILUSIÓN, NO DÉCIMOS"
Al respecto, Concha ha reconocido que los españoles son "un poco supersticiosos" con los juegos de Lotería. "Desde que un señor dijo que pasaba el décimo por (la administración) Doña Manolita y le tocaba siempre, todo el mundo pasa el suyo por aquí", apostilla. No obstante no todos los años han sido de bonanza, sino que ha habido algunos que no han tenido suerte.
"Tuvimos una racha que no, pero ahora llevamos bastantes años que sí", explica, y por ese motivo no sólo venden en la administración sino que también atienden muchísimos pedidos vía teléfono. La encargada ha explicado que suelen recibir llamadas "de toda España", incluso de ciudadanos extranjeros que van a viajar a la capital por unos días y encargan un décimo para tenerlo listo a su llegada.
"En España es curioso pero todo el mundo lleva algo de Lotería de Navidad. Es la más demandada sin lugar a dudas, es la más bonita, es parte de nuestra fiesta. Estamos contentos porque hemos repartido muchas ilusiones y eso es lo más bonito, porque trabajar aquí supone que repartes ilusiones, no décimos", ha agregado.
DE TODAS PARTES DE ESPAÑA
Los hay que vienen de muchas partes de España, como es el caso de Joadison. Este joven de nacionalidad brasileña ha aguardado cola durante cuatro horas para poder comprar diez décimos, y son todos para él. "Vengo aquí a coger diez décimos para mi y otros diez para la empresa en la que trabajo", explica.
Encarni, por su parte, ha viajado desde Murcia para comprar su décimo. Así, reconoce que no tiene ningún número en mente pero que le va a decir la frase del millón a la lotera: "Deme el número que vaya a tocar", comenta. "La gente es tradicionalista en este sentido, porque va a echar algo, quizá al aumentar los premios de lotería, se animan más y algún 'pellizquito' guardan para este sorteo", ha asegurado.
