Así está Parla. Basuras amontonadas. Es una huelga encubierta dicen desde el ayuntamiento. Los trabajadores de la empresa que se encarga de la limpieza viaria protestan porque -denuncian- llevan meses sin cobrar. Los trabajadores llevan un mes sin cobrar y ya han protestado varias veces en el Ayuntamiento, que debe más de cinco millones a las empresas concesionarias.
Un nuevo problema para la nueva alcaldesa de Parla, Beatriz Arceredillo. Un total de 160 trabajadores de limpieza protestan de esta manera contra el Ayuntamiento por los los impagos de las últimas nóminas que estaban sufriendo por parte de su empresa, Linorsa.
La concesionaria justifica los retrasos por la deuda contraida por el consistorio, que lleva sin abonarles cuatro mensualidades –desde agosto a noviembre–, más de un millón de euros. Desde octubre cuando los trabajadores han dejardo de cobrar sus nóminas.
El comité de empresa del servicio de recogida de basuras y limpieza viaria de Parla ha asegurado que no han convocado una huelga en el servicio y que los paros que están realizando algunos trabajadores podrían responder a "intereses personales" de éstos, mientras la alcaldesa, Beatriz Arceredillo, asegura que ya estudia medidas para solventar la situación.
Al respecto uno de los miembros del comité de empresa, César Martín, del sindicato UGT, ha señalado que han hablado ya "con todos los trabajadores de todos los turnos" para transmitirles que no se ha convocado oficialmente ninguna huelga y que "las formas de manifestación no eran las más adecuadas y eran ilegales", en referencia a la existencia de una posible huelga encubierta.
"Estamos moviéndonos y preparándonos para hacer las cosas como hay que hacerlas, legalmente", señala Martín, que indica que ya han iniciado los trámites para convocar una huelga que podría llegar dentro de dos semanas, pero que mientras tanto no apoyan ningún tipo de paro en el servicio.
Al respecto el representante de los trabajadores indica que el hecho de que algunos no estén realizando su trabajo en el servicio de recogida de basuras "podría ser" que se debiera a "condicionantes políticos", toda vez que en otras ocasiones han intentado convocar una huelga contra el gobierno entonces presidido por José María Fraile y que no hubo acuerdo de todos los empleados para llevarla a cabo.
ALCALDESA TOMARA MEDIDAS
Por su parte la alcaldesa de Parla, Beatriz Arceredillo, ha señalado que debido al impago a los trabajadores ya están tomando medidas, ya que por un lado han solicitado un informe de salubridad "para ver el estado del municipio" y por otra parte están estudiando medidas "de urgencia" para solventar esta situación.
Arceredillo además ha aseverado que desconoce los motivos por los que se está dejando de recoger la basura en algunas zonas del municipio, al tiempo que desde UGT admiten que tuvieron una reunión con ella el pasado jueves en la que les dijo que "había ofrecido pagar una cantidad de dinero para que la empresa pusiera el resto y hacer frente a las nóminas", aunque según el sindicato la UTE se negó a optar por esta solución.
EL PP RESPONSABILIZA A TOMAS GOMEZ
Al mismo tiempo el Partido Popular de la localidad ha responsabilizado de la situación al ex alcalde de Parla y actual secretario general del PSM, Tomás Gómez, ya que todo se debe a "una lucha interna del PSOE que salpica a los vecinos de Parla y a la ciudad".
Así lo ha señalado el portavoz del PP local, Miguel Angel López, que ha opinado que Gómez "no admite que no controla la alcaldía de Parla y hace todo lo posible para poner la ciudad patas arriba, que se dejen de prestar servicios públicos y forzar la voluntad de la alcaldesa para que dimita".
CINCO EMPRESAS DIFERENTES
Mientras tanto desde la Federación de Servicios Públicos de UGT de Madrid han recordado que la situación en el servicio de limpieza viaria y recogida de basuras de Parla se ha denunciado a lo largo de toda esta legislatura, en la que el servicio ha sido adjudicado a hasta cuatro empresas de manera sucesiva (Valoriza, Himalaya, Editec y Parla Limpio).
La situación deja, según UGT, una deuda aproximada de 2000 euros a cada trabajador y ahora, con el impago de la última nómina, "llueve sobre mojado" tras haber aguantado sucesivos impagos a la plantilla y una "merma muy significativa en la calidad de un servicio tan esencial para los ciudadanos".
Por último UGT considera "insostenible este modelo de gestionar un servicio público y esencial para la ciudadanía", por lo que piden una "servicio ejemplar y de calidad, que garantice el mantenimiento de la ciudad y los derechos y salarios de los trabajadores".
