La Guardia Civil encontró recientemente el cadáver de una vecina de Valdilecha que había fallecido hacía más de dos años por causas naturales pero, al no llevarse bien con familiares y vecinos, no sabían qué le podía haber ocurrido.
Según ha confirmado hoy la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, el cadáver en avanzado estado de descomposición de Ángela G.G., que ahora tendría 52 años, fue hallado en su vivienda de la citada localidad el pasado día 16 sin ningún signo de violencia. Además la autopsia confirmó que falleció por muerte natural.
Los vecinos de la pequeña localidad, de menos de 3.000 habitantes y ubicada a 40 kilómetros al sureste de la capital, no sabían nada de Ángela desde finales de 2013.
Inicialmente no se extrañaron porque la mujer no se hablaba con los vecinos y supusieron que se habría ido del pueblo sin comentarlo, pero luego supieron que su familia, con la que tampoco se trataba, tampoco sabía nada de ella.
Finalmente un juzgado abrió diligencias y el pasado día 16 ordenó la apertura de la casa.
Cuando la Guardia Civil llegó el domicilio ya vio por la mirilla de la puerta que la mujer estaba fallecida sobre un sofá, en avanzado estado de descomposición, por lo que se ordenó el levantamiento del cuerpo y la práctica de la autopsia.
El Juzgado de Instrucción número 1 de Arganda se ha hecho cargo del caso y ha abierto diligencias previas de investigación tras recibir el atestado de la Guardia Civil.
Tras el levantamiento del cadáver, se envió el cuerpo al Instituto Anatómico Forense y ahora el juzgado está a la espera de recibir el informe que determine las causas exactas de la muerte, para actuar en consecuencia, según han informado a Efe fuentes jurídicas.
