El alcalde de Madrid y candidato del PP a la reelección, Alberto Ruiz-Gallardón, pretende intervenir en la calle Mayor y en un tramo de la de Goya para ampliar el espacio para el peatón y permitir el uso de la bicicleta, así como peatonalizar las calles de Conde Duque y Carretas. En un acto de su campaña celebrado en el centro de operaciones de la EMT de Sanchinarro, en Hortaleza, el alcalde ha presentado sus propuestas en materia de transporte público y contaminación, que son, ha dicho, en las que va a adquirir "más compromisos concretos y detallados".
El proyecto para Goya, en el tramo entre Alcalá y Serrano, se ganaría espacio para el peatón y la bici en sentido bajada al ampliar las aceras, suprimir un carril y crear un ciclocarril de uso compartido con velocidad limitada para coches a 30 kilómetros por hora.
Además, en sentido subida se suprimiría la banda de estacionamiento y quedaría un carril bici y un carril para autobuses, taxis y motos.
Como no supone la construcción de aparcamientos subterráneos, como ocurrió en Serrano, no sería una obra larga sino "inmediata", aunque el compromiso es para toda la legislatura, ha precisado.
En Mayor, desde Bailén, donde se desplazaría el control de vehículos autorizados, hasta el cruce con la calle de San Nicolás habría un carril libre y un ciclocarril por sentido; de ahí hasta San Miguel se ampliarían las aceras y habría una ciclocalle y hasta Sol habría una ciclocalle hacia esta plaza y un carril bici en dirección Bailén.
Esto, ha anunciado, permitirá la peatonalización de calles en el entorno, en concreto las de Cuchilleros, travesías de Bringas y del Arenal y la calle de Carretas.
Asimismo, la calle de Conde Duque sería peatonalizada para ponerla "al servicio del centro cultural" como una "alfombra urbana que proyecta y amplia" este espacio cultural, en palabras del alcalde.
El programa de Ruiz-Gallardón incluye asimismo la creación de dos nuevas áreas de prioridad residencial en el barrio de Palacio -alrededor de àpera- y en el entorno del eje peatonal de Fuencarral, que se delimitarían "tras un proceso de diálogo y consenso con los vecinos".
Todo esto sería posible, ha indicado el candidato, porque las obras realizadas en las anteriores legislaturas, como la reforma de la M-30 y la ampliación del Metro, permiten recuperar espacio para el peatón sin perder movilidad y por tanto competitividad.
También ha propuesto el aspirante a la reelección la construcción de nuevos aparcamientos subterráneos "donde sea posible", para atender preferentemente la demanda de los residentes.
Por otra parte, la ya antigua propuesta de abrir aparcamientos disuasorios alrededor de la ciudad conectados con el transporte público para tratar de evitar la entrada de coches a la capital se mantiene también en este programa, con la disponibilidad a ceder suelo municipal, si bien se reconoce que habría que hacerlos conjuntamente con la Comunidad a través del Consorcio Regional de Transportes, con Fomento, con Adif y con Metro.
Ruiz-Gallardón se ha comprometido a crear un nuevo billete de autobús válido durante un determinado período de tiempo, que se establecerá de acuerdo con el Consorcio Regional de Transportes, para hacer posible el transbordo entre líneas, como ocurre en el Metro.
También a introducir nuevos sistemas de pago y adquisición de billetes mediante móvil, tarjeta e Internet; a extender el uso, a través del Consorcio, de la tarjeta sin contacto; a ofrecer wifi gratuito en las paradas, como ahora hay en los autobuses; y poner nombre a las paradas de autobús, como en el suburbano.
Otra idea que quiere llevar a cabo es construir dos plataformas reservadas al autobús de un carril por sentido en distritos exteriores a la M-30, las primeras entre el 12 de Octubre y los intercambiadores de Aluche y Ciudad Jardín y entre las áreas intermodales de Ciudad Lineal, Alsacia, Pavones y El Pozo.
Quiere asimismo construir cuatro nuevas áreas intermodales en Mar de Cristal, Puerta de Arganda, Colonia Jardín y Aviación Española; remodelar el intercambiador de avenida de América, que va a beneficiar a 14 millones de usuarios, y construir uno nuevo en Conde Casal que calcula que tendría 9,5 millones de usuarios.
Todo ello sin dejar de colaborar en el plan de mejora de Metro, con nuevas reformas de estaciones antiguas para, entre otras cuestiones, mejorar su accesibilidad.
