Gallardón: Es "obligación" de la sociedad proteger la "dignidad" de los 'sin techo'

  • Asegura que nada tiene que ver con la Ley de Vagos y Maleantes, que "no es una ley franquista, sino socialista"
  • Aguirre partidaria de los albergues, reconoce que no se les puede privar de sus derechos

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha insistido este jueves en que la petición de una ley estatal para poder obligar a los 'sin techo' a dejar de dormir en la calle siempre que haya recursos públicos gratuitos suficientes no busca mejorar la estética de la ciudad, sino proteger "la dignidad" de este colectivo porque es "obligación" de la sociedad hacerlo. El primer edil se ha explayado este jueves en hablar sobre este asunto durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, donde ha defendido que "no se puede tener una mirada indiferente hacia las muchas personas que en Madrid y en otras ciudades" viven en la calle y ha asegurado que "no es un problema ni de convivencia ni de estética, sino de la dignidad de las personas, de su salud y de su atención".

Tras recordar que hace unos años el reproche que se hacía a las administraciones públicas era la falta de recursos para atender a este colectivo, ahora que ya se han suplido esas carencias y que (al menos en el caso de Madrid), "hay plazas libres en los centros", el objetivo debe ser atender a las entre 500 y 600 personas que, según sus datos, pernoctan en las vías públicas de la capital.

"Esta es una realidad, y frente a esa realidad se puede decir que, como es su voluntad, les tenemos que olvidar y que no nos debe preocupar ni su situación médica ni psíquica ni alimentaria. Pero yo lamento decir que no es mi opinión, y creo que estamos obligados a acercarnos a estas personas y, una vez que tenemos los recursos, encontrar los instrumentos para que puedan recibirlos", ha considerado. De hecho, a su juicio eso "es la obligación de una sociedad moderna y que se dice a sí misma solidaria", porque "decir que no es problema (de la sociedad) porque voluntariamente no quieren incorporarse (a los recursos públicos) sin saber las razones por las que lo deciden así o sus patologías es una actitud que no se corresponde con un discurso de solidaridad". "Y nosotros tenemos la obligación de tratar a aquéllos que ya tienen estos problemas o a quienes inevitablemente derivarán en los mismos si continúan en esta situación de marginación", ha reiterado.

CONCULCAR EL DERECHO INDIVIDUAL

Sin embargo, la realidad también es que muchas de las personas que duermen en la calle lo eligen de forma voluntaria, a pesar de conocer los recursos puestos a su disposición. Frente a este argumento, el primer edil ha recordado que se trata de una "población muy difícil", el 40 por ciento de la cual "tiene problemas mentales o de adicciones". "Y yo soy de los que piensan que, no el Estado, sino la sociedad, no puede permanecer indiferente. Sé que se puede alegar que frente a esto su derecho individual a permanecer en esta situación debe primar sobre la obligación que tienen la sociedad y el Estado de evitar esta situación de degradación; respeto el debate absolutamente, pero mi opinión es que nosotros tenemos que hacer todo lo que esté en nuestra mano y encontrar todos los instrumentos necesarios para que esas personas que cada noche siguen durmiendo en la calle duerman en un centro donde tengan su dignidad garantizada, acceso a techo, alimentación e higiene; y acceso o derivación si es necesario a asistencia sanitaria", ha opinado.

NO SERA CONSIDERADO INFRACCION

En cualquier caso, Gallardón ha asegurado que su objetivo no es que esta ley recoja la actitud de quienes seguir en la calle como "ningún tipo de infracción", ya que " las personas sin hogar no son los infractores, sino las víctimas". "Pero son unas víctimas a las que nosotros tenemos obligación de asistir aunque no nos lo pidan y aunque en ocasiones se opongan a esa asistencia", ha apostillado.

Con respecto a las críticas de algunos 'sin techo' sobre la falta de flexibilidad de los recursos municipales en materias como los horarios o la posibilidad de permitir que parejas duerman juntas, el primer edil ha señalado que "todos los profesionales que trabajan en los centros de atención son grandes profesionales" y que ellos aplican "normas, horarios y pautas de comportamiento interno que van en beneficio de los asistidos siempre". "Ellos evalúan sus resultados. Nosotros no aplicamos criterios políticos, sino técnicos, profesional. Si ellos estiman que tienen que modificar algo lo modifican directamente y el Ayuntamiento apoya siempre el criterio técnico que se plantea", ha afirmado.

Por último, al primer edil también se le ha preguntado por la comparación que los socialistas hicieron ayer de esta propuesta con la Ley de Vagos y Maleantes, y ha recordado que dicha normativa "nada tiene que ver" con lo que ha propuesto él. "Es más, entra en contradicción. Esa era una ley que pretendía expresamente proteger a la sociedad frente a los vagabundos, y lo que nosotros pretendemos es lo contrario: proteger a los indigentes y, a veces, protegerlos también frente a la indiferencia de la propia sociedad", ha explicado.

A renglón seguido, ha recordado además que la Ley de Vagos y Maleantes "no era una ley franquista, sino una ley socialista", ya que fue aprobada "en agosto de 1933, y las elecciones fueron a finales de año, lo que significa que en agosto de 1933 era presidente del Gobierno (Manuel) Azaña pero gobernaba en coalición con el PSOE". "Luego cuando alguien dijo ayer que la Ley de Vagos y Maleantes era franquista, no sé si quería decir que la propuesta socialista se identificaba con el Franquismo o que no está muy puesto en la historia del país", ha concluido.

UNA CUESTIÓN SOCIAL, NO ESTÉTICA

El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Madrid y candidato a la Alcaldía, Angel Pérez, ha defendido este jueves que la mendicidad es una "cuestión social" y "no de estética, por más que al alcalde le ofenda a la vista". Pérez consideraba que las declaraciones de Gallardón son "bastante reaccionarias". "Lo primero que tiene que haber son equipamientos y recursos para atender a las personas que están en la calle", ha defendido después de subrayar que la mendicidad "no es algo en lo que uno se encuentre porque quiere". "Si el señor Gallardón echa de menos una ley estatal que le permita tener los recursos, primero tiene que pedirla y yo estaría de acuerdo con una que regulase pero que también obligara a tener los equipamientos necesarios", ha expuesto.

El candidato socialista a la Alcaldía de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha dicho que la propuesta del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, le recuerda a "la Ley de Vagos y Maleantes", al tiempo que ha abogado por desarrollar un Plan de Inclusión Social y no un plan "de limpiar las calles" de personas sin hogar. "Esto no es un acto de beneficencia y de caridad, esto es un acto de política social y lo que hay que hacer es un Plan de Inclusión Social y no un plan de limpiar las calles de personas que no tienen hogar", ha señalado Lissavetzky en rueda de prensa.

En su opinión, es un problema muy heterogéneo porque "hay personas que tiene problemas de drogadicción, personas que tienen problemas de alcoholismo, personas que tienen problemas de salud mental, problemas porque han perdido el trabajo o porque está desestructurado y todo eso tiene que tener un tratamiento de siglo XXI, no del siglo XIX". "Esto es una lucha contra la pobreza y lo que está haciendo Gallardón es una lucha contra los pobres. ¿Es algo ético o es simplemente estético?".

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, reconocía hoy que, a pesar de que considera que los mendigos estarían mejor durmiendo en albergues que "al raso", no se debe "privar a nadie de sus derechos". Aguirre, que ha asegurado que desconoce exactamente "cuál es el cambio legislativo que propone el alcalde", recordaba que "el hecho de que (estas personas) no quieran aceptar esos servicios municipales es algo que muchos no compartimos o no comprendemos, pero es un hecho real y no hay mas que asomarse a la calle, no ya en Madrid, sino en todas las ciudades mas avanzadas del mundo".

Por su parte, la ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, tachaba hoy la propuesta del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, de "populista y estética". "Lo primero que tiene que saber el alcalde de Madrid es que cualquier ciudadano, por precaria que sea su situación, no pierde ningún derecho y sigue teniendo los mismos que cualquier otro ciudadano. En este sentido abogaba por garantizar los derechos de todos los ciudadanos españoles con "políticas reales e inclusivas", sea cual sea su situación y citaba como ejemplos las implantadas en ciudades como Sevilla, Palencia o Zaragoza, están funcionando "bien".

Mientras, 14 entidades especializadas en el trabajo con personas sin hogar, criticaban la propuesta de Gallardón tildándola de "retroceso", puesto que, a su entender, "vinculan a los ciudadanos que viven en la calle con conceptos como delincuencia, suciedad y violencia". "Erradicar el Sinhogarismo, que nadie duerma en la calle, es un deseo para nuestras entidades. Sabemos que el camino para conseguirlo pasa por aunar voluntades políticas y no por una ley estatal que haga desaparecer por la fuerza de las calles a las personas. En pleno siglo XXI, no podemos permitirnos un retroceso en la legislación de los derechos de los ciudadanos", denuncian los firmantes, entre los que se encuentran Cáritas Madrid, Acción en Red y la EAPN.

Las organizaciones explican que las personas sin hogar "son víctimas directas de violencia y no al revés" y apelan a un "trabajo integral" para incorporarlas al "día a día que impone la sociedad". "Si este es un objetivo que compartimos, no podemos poner el acento sólo en la emergencia, sino en todo el proceso de mejora y recuperación de la persona", apuntan. Por ello, invitan Ruiz Gallardón a "una reflexión conjunta" para buscar "soluciones sociales a problemas sociales".