El Escorial nombra "hija adoptiva" a Esperanza Aguirre

La presidenta regional, Esperanza Aguirre, ha sido hoy nombrada "hija adoptiva" de El Escorial, localidad en la que siempre pasó sus veranos y que eligió como escenario para su boda, según ha recordado ella misma. Durante el pleno del Ayuntamiento, Aguirre ha recibido la medalla que la acredita como "hija adoptiva" de El Escorial de manos de su alcalde, Antonio Vicente Rubio.

Tras el pleno, la presidenta regional ha subrayado que esta distinción supone para ella "un grandísimo honor", porque aunque no nació en esta localidad, pasó en ella los veranos de su infancia, adolescencia y juventud, y también se casó allí, en octubre de 1974, con Fernando Ramírez de Haro. Ha recordado también que durante su etapa como ministra de Educación -entre 1996 y 1999- promovió la construcción de un instituto y una escuela infantil en El Escorial.

El Ayuntamiento ha concedido también diversas condecoraciones durante el pleno, a varios empleados municipales jubilados, a un policía local, a una escuela de atletismo, a un grupo de baile, a un concejal socialista (a título póstumo) y a los herederos del fundador de la fábrica de chocolates Matías López.

La presidenta regional, que ha expresado su "gratitud" a todos ellos "por lo que han hecho por El Escorial", ha destacado de forma especial la medalla a la familia de Matías López, quien abrió la fábrica en el siglo XIX y que, pese a que dejó de funcionar en los años 60, su tataranieto tiene intención de volver a abrir sus puertas, "una excelente noticia" para el municipio y para la Comunidad, según Aguirre.

A su llegada al Ayuntamiento, la presidenta ha sido recibida en la calle por una treintena de personas -muchas de ellas ataviadas con camisetas verdes de defensa de la enseñanza pública- que le han reprochado los recortes en sanidad y educación. Con una pancarta en la que se podía leer 'Mentirosa: Sanidad y educación públicas', los manifestantes han exhibido carteles como 'Espe, sigue así que hundes a Madrid' y, tras el pleno, han seguido a Aguirre hasta la iglesia de la localidad -donde ha asistido a misa- con gritos como 'Fuera' o 'No te queremos'.