Detenidos siete miembros de Ultra Sur por agredir a tres hinchas del Frente Atlético

La Policía Nacional ha desarticulado a la cúpula de los Ultra Sur que el día de Nochevieja atacaron e hirieron a miembros del Frente Atlético en el bar Río Duratón, situado en la calle Epifanio de Madrid, a pocos metros del estadio Vicente Calderón, según han informado fuentes de la investigación.

La pelea se inició a las 18 horas cuando una docena de miembros de los Ultras Sur entraron en el local y la emprendieron a golpes contra varias personas del Frente Atlético que allí se encontraban. Llegaron de imprevisto en varios coches y utilizaron defensas extensibles, armas blancas y bates de béisbol.

Como consecuencia del ataque, varios hinchas rojiblancos resultaron heridos, tres de gravedad. Concretamente, un chico presentaba un corte abierto en la pierna y varios hematomas, otro una importante herida en la cabeza y otra joven una puñalada en la mano. Los tres se están recuperando satisfactoriamente.

A pesar de lo ocurrido, sólo uno de los heridos denunció el ataque pocos días después por miedo a las represalias. No obstante, tras conocer lo ocurrido, la Policía Nacional inició una investigación y averiguó la identidad de los agresores. Se trataba de los integrantes de una de las alas más duras de los Ultra Sur y de ideología ultraderechista.

Así, en la última semana los agentes han detenido a siete personas implicadas en los hechos. Sin embargo, entre ellos no estaba El Niño, mote por el que conocen a uno de los supuestos líderes de este grupo radical. De hecho, la operación sigue abierta y la Policía intenta localizar a los otros implicados en la pelea en otras zonas de Madrid.

No es la primera vez que los aficionados ultras del Real Madrid ataca a sus homólogos atléticos. El pasado 8 de noviembre ocurrió algo parecido en el bar Drakkar, radicado en la calle Marcelino Santamaría, cerca del Bernabéu. Tampoco el bar Río Duratón se libra de altercados. En diciembre varios radicales valencianistas arrojaron a sus puertas varios botes de humo.

Las Fuerzas de Seguridad interpretan lo ocurrido en Nochevieja como un intento de reivindicarse y reaccionar por parte de una parte de los Ultra Sur después de que a finales del año pasado la dirección del club blanco les expulsara del fondo sur del campo, donde siempre se sentaban, según han indicado fuentes cercanas al caso.