Detenido un hombre en Villaverde por apuñalar a su madre y retener a sus 2 hijos

  • Sobre el detenido pesaba una orden de alejamiento
  • El detenido de 25 años se encontraba escondido en un armario

Un hombre de 25 años ha sido detenido tras apuñalar a su madre y retener a sus dos hijos menores en su domicilio particular en el distrito de Villaverde, en la capital, según han informado fuentes policiales.

Según el relato de los hechos, la Policía, al llegar al lugar, se encontró a la madre del detenido en estado de "excitación" y sangrando "profusamente" del hombro izquierdo. Esta les informó que sobre su hijo pesaba una orden de alejamiento y que pese a ello se había acercado, la había apuñalado y expulsado de la casa.

En el momento del suceso estaba con la madre herida la pareja y madre de los dos menores, que también fue obligada a la fuerza a salir de la casa, donde el ahora detenido se quedó con los menores. La madre explicó a los agentes que aunque intento llamar al timbre de la vivienda estando ya fuera su hijo hizo "caso omiso" y puso la música "muy alta".

Cuando llegó la asistencia sanitaria para atender a la madre, que posteriormente fue trasladada al Hospital 12 de Octubre, la Policía pidió la asistencia de los Bomberos para que procedieran a abrir la puerta del domicilio. También acudió la Policía Nacional alertada por el gran número de agentes municipales en la zona.

Precisamente fueron agentes de la Policía Municipal los que consiguen acceder a la vivienda por la puerta trasera. Una vez dentro, se encuentran un cuchillo de cocina de unos 30 centímetros de hoja con presuntas manchas de sangre, y en una de las habitaciones a los dos menores durmiendo.

La Policía procedió a sacarles de la casa "apresuradamente" y les llevan junto a su madre para recibir atención del SAMUR. En tanto al detenido los policías le encontraron en una de las habitaciones escondido cuando fueron a desmontar un armario donde habían encontrado un revolver.

En ese momento, observaron una zapatilla y una mano y pidieron al presunto agresor que saliera por su cuenta del armario empotrado sin embargo este no obedeció y empezó a propinar "patadas y puñetazos" a los agentes, una actitud "hostil y amenazante" que se repitió en dependencias policiales. Además, en el calabozo comenzó a darse "cabezazos contra la pared y a autolesionarse".